Capítulo XI

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Comprensión

El timbre sonó.

Mierda.

Con prisa, me vestí y me até la corbata con la misma torpeza de siempre. Salí despedido, dejando atrás el asunto. Por ahora, me centraría en los exámenes. Y luego, resolvería aquel misterio lleno de rosas y algunas estrellas.


...

El paisaje montañoso y la temprana mañana me dejaban en un estado de somnolencia. Sentado en el autobús, esperaba llegar con todos mis compañeros a las tan ansiadas "mini vacaciones" que nos habían prometido los profesores después de los exámenes.

Según habían explicado, querían recompensar que la última salida con la academia fue bastante mal (por el ataque de los villanos y el secuestro de Kacchan), y hacer una nueva, completamente dedicada a un respiro y descanso para los alumnos. Cosa que alegró a todos, y a mi... bueno, no estaba mal. Pero tenía tantas ganas de mejorar, que no pude evitar pensar que era una pérdida de tiempo. Aunque durante la semana de exámenes había estado tan estresado que no me iría mal desconectar.

Y también estaba el tema de las rosas y las estrellas, que me perseguía en cuanto me descuidaba. Qué vida más ocupada tenía ahora...

Suspiré. Sin duda, debería tomarme estas vacaciones para relajarme y disfrutar con mis amigos. Pronto sería un héroe, y no tendría tiempo de darme estos lujos.

Observando los verdes pinos y la carretera llena de curvas, me dormí, mientras imaginaba un futuro brillante siendo el mejor héroe de todos. Todos mis deseos y pensamientos siempre derivaban a lo mismo, a mi gran soñada meta y único objetivo.

Al llegar, una encantadora casa de piedra y madera en medio de la montaña nos dejó a todos pasmados. De dos plantas, llena de ventanas enormes, y de estilo rústico. Entre gritos de asombro e impaciencia, entramos en ella acompañados de los dos profesores que venían con nosotros, All Might y Aizawa.

-En la planta de arriba los chicos, en la de abajo las chicas, hay dos baños abajo y solo uno en la de arriba –nos explicó Aizawa con sequedad.

-¿¡Porque tenemos que estar separados chicas y chicos!? –gritó fuera de si Mineta.

-¿En serio lo preguntas? –la cara de asco de Asui fue dirigida a su comentario.

-¡No me parece bien, eso es discriminatorio!

-El día en el que no sienta que eres un peligro para ellas, me dará igual –Aizawa-sensei se frotó la sien-, pero por ahora, id sin más preámbulos y tonterías a vuestros cuartos a dejar las cosas –una mirada aterradora nos calló. Obedecimos ignorando el espectáculo de Mineta, que ante aquello, fue inteligente y no dijo nada más.

-Habrán más oportunidades... -lo escuché susurrar, relamiéndose los labios. A veces me daban ganas de apartarlo, no solamente de mujeres, sino de todo el mundo. Por el bien de la humanidad.

-Bien, muchachos –All Might nos reunió de nuevo en el comedor-, este fin de semana es de total descanso, pero por si queréis hacer alguna actividad, hay una piscina en el jardín de atrás de la casa-

-¡PISCINA! –Kaminari, Sero, Ashido y Kirishima desaparecieron, corriendo hacía la puerta de atrás que daba al jardín. No pude evitar reír.

-Bueno, como estaba diciendo, hay una piscina, y también unos senderos que llevan a la montaña, al bosque y a un río que hay por aquí cerca, por si queréis pasear. Os recomiendo mucho que vayáis a dar una vuelta y contempléis el paisaje, es muy bonito –si lo recomendaba All Might, iba a ir sin dudarlo.

Persiguiendo estrellas --KatsuDeku--Donde viven las historias. Descúbrelo ahora