Mi mascota [ItaNaru] [Corrigiendo]

Capítulo 15: Te atrapé

-Así que... ¿Donde esta el gato? - Preguntó Kabuto mirando a su alrededor.

-Emm...

"¿Donde se metió?" Se preguntó Deidara buscando en el sillón, bajo este, bajo los almohadones sobre este pero no estaba.

-¡Gatito! - Llamó pero no aparecía. - Disculpe creo que tendré que buscarlo, debe de haberse escondido en algún lado. - Sonrió con nerviosismo. - Si quiere puede pasar por las otras casas.

-No, esta bien.. Esperaré. - Le dijo y se sentó en el sillón.

Deidara asintió y fue a buscarlo en los posibles escondites, los cuales eran sobre las alacenas de la cocina, en la habitación bajo su cama o sobre el armario, etc.

-Ya estoy dentro. - Aviso el peligris por un micrófono.

-Bien, trata de no llamar tanto la atención y asegurate de traermelo.

Un gruñido se oyó en la sala y Kabuto soltando el maletín que llevaba se puso sobre sus rodillas y miro bajo el sillón.

-Con que ahí estas. - Sonrió de medio lado. - Tu dueño no debe haberte visto por la oscuridad.

Quiso meter la mano para sacarlo pero solo consiguió un profundo y doloroso rasguño.

Su mano sangraba...

-No festejes que no eres el primero. - Dijo sacando una venda y poniéndosela en la mano antes de manchar la alfombra y dejar pistas.

De su maletín sacó una jeringa y se puso un guante en una mano.

Con esta protegida metió la mano bajo el sillón y sacó al gato del pellejo, este se retorcía y se aferró a la mano clavando sus uñas y mordiendo pero ni bien estuvo fuera de la protección que le brindaba su escondite una aguja fue clavada en su cuello y pronto no puso resistencia al ser metido en el maletín.

-¡¿Que fue eso?! - Preguntó Deidara apareciendo.

-¿Disculpa? - Kabuto se creyó descubierto.

-Creí haber oído a mi gato. - Dijo buscando con la mirada.

Kabuto suspiro levemente con alivio.

-Si me disculpa me marcho, tal vez la próxima semana vuelva a pasar, ahora debo pasar por las demás casas. - Acomodó su ropa y tomó su maletín. - Si es tan amable. - Dijo al notar que el rubio observaba su mano vendada.

-Oh.. Si.. - Salió de sus pensamientos y le acompañó hasta la puerta.

-Los gatos son así. - Empezó a decir. - No se preocupe si no aparece, siempre suelen irse pero siempre regresan... - Deidara asintió desconcertado. ¿Por que le decía eso? - Claro. - Puso media sonrisa. - Al menos que alguien se lo robe o muera de alguna manera. Que tenga un buen día, adiós.

Viéndolo subir al vehículo Deidara abrió los ojos con temor... Será que...

-¡Gatito! - Comenzó a llamar entrando a su casa.

Pero por más que buscó y busco por horas no lo encontró.

...

-Buen trabajo. - Le dijo mirando al gato inconsciente sobre la camilla.

Kabuto asintió y se quedó observando lo que hacia su jefe.

-Esperaremos a que pase el efecto de el sedante y que despierte. - Se relamio los labios. - Ahí empezaremos la investigación, por el momento solo toma una muestra de sangre y analizala.

-Si señor.

...

Estaba boca abajo acostado en su cama.

Se lamentaba haber actuado mal, el no haber hecho algo para cambiar las cosas.

Aunque su mente se lo advirtió.

Es como cuando sabes que si haces o no haces cierta cosa todo podría cambiar ya sea para bien o mal.

En caso de él fue para mal.

Pero era una lucha interna de lo racional contra lo irracional.

Parecía tan fácil y al mismo tiempo tan difícil tomar una decisión.

Tener algo tan cerca y sentirlo tan lejos, tan inalcanzable.

Así es como lo veía a Naruto y por primera vez deseo al menos el ser de su raza, poder cambiar.

¡Malditos sentimientos y maldita mente alocada!

¿Quien puede ser tan tonto que no se conforma con solo ser homosexual sino que también se tiene que enamorar de su gato?

Si, un loco como el.

Esa seria la despierta correcta.

Pero por más que intentaba dar vueltas al asunto no encontraba la manera, no había caso...

De alguna forma cayó en los encantos de su propia mascota.

Ese tierno animalito que ahora no se encontraba con el.

Obviamente se enamoró de la transformación humana del minino, no del minino en si, aunque no puede negar el hecho de que se enfureció cuando vio a Sai y... Eso...

-¿Donde estará ese estúpido gato? - Se preguntó en voz alta.

-Wow como de amor pasa a odio. - Dijo Sasuke parado en la puerta de la habitación. - ¿Si no lo quieres para que lo buscas?

Un Almohadazo fue lo que consiguió como respuesta.

-¡Oye! - Se quejó el menor. - ¡es en serio! - Le dijo cruzándose de brazos.

-Del maldito y estúpido gato que estaba hablando es de ese que trajo la...

"¡Ya paso una semana y no vino a buscarlo!" Pensó Itachi enojado y al mismo tiempo aliviado.

Ya que si la señora aparecía a buscar a su gato se iba a enterar de la "triste" desaparición de Sai.

-¿Que?

-Ya dejalo. - Dijo restando importancia al asunto y levantándose de su cama para ir a comer algo.

-Como sea.. - Sasuke tampoco presto atención a lo que decía. - La rubia oxigenada llamó. - Avisó.

-¿Deidara?

-Si, dijo que algo de su gato y de que vayamos a su casa o sino no se que porque le corte la llamada.

...

Estaba asustado porque no sabia donde estaba, no reconocía el lugar y se sentía amenazado.

No era su territorio y no había nada ni nadie familiar.

-Hasta que despiertas gatito. - Quiso gruñir y alejarse al oír aquella voz. - Oh no, yo que tu no lo intentaría. - Le dijo burlón. - Comencemos.

...

Espero y les haya gustado...😳😓

Pronto subiré más...😏

Gracias x leer...😚😘

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Bye bye😳😚😘