"Kilian libro 2" es una continuación directa de "Kilian, libro 1".
Editando. Los capítulos que dicen "editado" son los que deben leer, los demás son daño a la retina irreversible por sus errores sin editar, prohibida la entrada ( ¶ 3 ¶ )
Estoy oblig...
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POV FRANK.
—¿Qué dijiste? —habló Kilian con un tono que me hizo tensar los músculos.
Me concidero una persona muy perspectiva, dejando de lado las bromas de mis amigos sobre un instinto animal inexistente, pero sí era muy receptivo con respecto a los cambios en el ambiente y la sensación que desprendía Kilian me erizaba los vellos.
«Es un buen chico, es muy amigo de Hunter, no va a dañarme» tuve que recordarme a mí mismo para detener el temblor de mi mano.
Que él no vaya a lastimarme a mí, no significa que no le vaya a romperle los dientes a quienes tuvieron algo que ver con la desaparición de mi mejor amigo.
—Yo solo... cuando fui a la parte de atrás donde habían llamado a Hunter, me encontré con las chicas caminando hacia las cabañas y aunque pregunté "¿Dónde está Hunter?", no me dijeron nada específico, entre risas contestaron "No nos molestará por un rato, así podremos divertirnos sin que esté en medio" y así fueron a la tercer cabaña cerca de las cuatro de la mañana.
En ese momento pensé lo peor.
«Hunter no puede ser tan imbécil de romper la única regla que impuse... ¡Mierda! Sí, es capaz, es lo más probable»
—¿Qué diablos hicieron? —inquirí más que furioso.
Mi sangre hirivió de un segundo a otro.
—No sé, pero no lo encuentro por ningún lado y estoy preocupada. Él fue amable conmigo y yo... lo dejé solo.
—Hunter... —murmuró Sanna llena de preocupación.
—Hay que buscar a las tres idiotas que comenzaron esto y que hablen —sugirió Rossy poniéndose de pié y caminando en dirección a la segunda cabaña.
Kilian caminó junto a ella con una mirada inexpresiva.
ØØØ
—Oigan, pedazos de zorras ¿Dónde esta mi chico? —cuestionó la oriental enfadada y sacando pecho, como toda una bravucona.
Las tres en cuestión estaban fumando frente a la segunda cabaña, la miraron de reojo y luego a nosotros detrás de ella.
—¿Por qué tendríamos que saber? —fingieron inocencia, hasta que Kylla apareció y sus rostros se transformaron— ¡Tú! Negra chismosa, abriste tu sucia boca —Kilian interrumpió sus insultos
Tomó a la más bajita del brazo, la puso de pié y acercó su rostro de forma amenazante.
Todos quedamos petrificados.
Una ronda se formó al instante, más y más personas llegaban a ver que sucedía.
