Opuestos

¿Es amor...

Aviso: Escenas explicitas, contenido para adultos, sexo vamos. Si no quieres leer la escena de amor desmesurado, puedes saltarte la parte donde indique.
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Han pasado ya varias semanas desde que llegue a Bandle, mi juicio está a tan solo dos días.

Casi ha pasado un mes y Noxus está por atacar la ciudad en cualquier momento, solo espero que sea antes de que dicten mi sentencia.

-¿Te ocurre algo Vei?-

-No, ¿por qué lo preguntas?-

-Por qué te has quedado viendo el desayuno-

-¿Y qué tiene de malo?-

-Que llevas así un cuarto de hora-

Regrese la vista al plato, no tengo hambre.

-No me apetece comer más-

-Pero si casi ni lo has probado-

-¿¡Y que tiene que ver!?-

-Veigar, dime que es lo que te pasa-

-Nada, yo solo... Iré a que me dé un poco el aire-

Sin nada más que decir salí de la casa a dar una vuelta.

Camine sin rumbo hasta llegar a un pequeño parque donde había pequeños yordle jugando a la pelota.

Me senté en uno de los muchos bancos y me dedique a pensar.

Aunque haya pasado muy buenos ratos con Teemo, no puedo estar con él. Mi misión es capturar Bandle, y así dominar al resto de ciudades.

Sé que es difícil pero debo aceptar que mi lugar no está aquí, que debo...

-Auch- Una pelota cayo delante de mí después de golpearme.

-Disculpe señor, no era nuestra intención golpearle- La dulce voz de la niña me dio lastima al saber lo que le ocurriría la ciudad.

-No te preocupes pequeña, fue un accidente- De un lanzamiento le regrese la pelota a su dueña y esta con un simple gracias continuo jugando junto a sus amigos.

En verdad me da lástima, si Noxus conquista Bandle todo cambiaria, los yordles prácticamente pasaríamos a ser esclavos, bueno, excepto yo.

Pero ya no puedo dar marcha atrás, Bandle será atacada y yo ayudare.

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-Ya estoy de vuelta-

-Ya era hora, se ha hecho de noche mientras estabas fuera, me empezaba a preocupar-

-No tienes que preocuparte por mí-

Teemo está en la mesa con varias bebidas alcohólicas sin empezar.

-¿Y esto?-

-Como estabas tan alicaído esta mañana he comprado algunas bebidas para que te relajes un poco-

-¿Y planeas que me las beba todas?-

-Obvio no, yo te ayudo-

Y así pasamos lo que quedaba de día, bebiendo y charlando.

-Y dime, ¿qué era lo que te preocupaba esta mañana?- Teemo claramente se encuentra ligeramente borracho.

-Nada, cosas mías- Al igual que el explorador yo también estoy un poco bebido.

-Vamos, dímelo. ¿Acaso estas triste porque la yordle que te gusta te ha rechazado?-

-¿Qué? N-No, no me ha rechazado nadie-