Aléjense De Mí, Idiotas. Hailee Grier. Magcon.

Capítulo 19

Me levanto de la cama de mal humor. Empezamos bien el día. Tras pasarme por el baño, bajo las escaleras con mi pijama de dinosaurio.

—¡AAAAAH! —grito al sentir saltar a alguien a mi espalda. Obviamente, termino cayéndome por las escaleras y mi rostro come el delicioso suelo —Su puta madre... —murmuro aún con la cara pegada al suelo.

—¡Oh Dios! ¡Ha muerto! ¡Ha muerto! —grita Matthew mientras rebota su culo gordo en mi espalda. El que va morir será él. Idiota —¡Lo siento! ¡Yo solo me he emocionado porque he visto un dinosaurio!

—¿Quién? —gritan todos los chicos y siento sus pasos.

—¡Matthew quita el culo de la espalda de mi hermana! —le grita Nash molesto y siento que le empuja o algo así.

—Hailee —mi mellizo me zarandea de un lado a otro y me da la vuelta, quedándome así boca arriba, sin embargo permanezco con los ojos cerrados —abre los ojos. Vamos Hailee, no tiene gracia... —me sacude —¡Hailee!

—Vamos Grier, ya dejate de chorradas —resopla Gilinsky.

Abro los ojos en par en par y lo primero que hago es encontrar a la presa y al segundo atacarla.

—¡Socorro! —grita Matt —¡Socorro!

Comienzo a reír a carcajadas y le suelto. El rubio rápidamente se esconde detrás del canadiense y la jirafa.

Sonrío angelical a todos quienes me observan incrédulos.

—Hoy estoy de mal humor, así que no me molesten.

—Entonces te recomiendo que pases el día fuera de esta casa.

Miro a Aaron con los ojos entrecerrados.

—¿Acaso me estás echando de casa?

—¿Eh? No, no yo solo te decía que esta casa no es el mejor sitio para estar tranquila sin que nadie de moleste. Quiero decir, mira a tu alrededor... —señala a los chicos con la cabeza —¿de verdad crees que son gente tranquila? Porque a mí no me parece...

—Gracias por preocuparte Aaron —le palmeo el hombro y sonríe —pero cállate —y le desaparece la sonrisa —Me voy a casa de Naroa —les aviso.

—¡Te acompaño! —exclama Johnson al instante y todos le miramos pícaros—a ver, lo digo por ti. No vaya ser que el golpe te haya afectado y que te desmayes por...

—Anda vamos —le interrumpo con una sonrisa y a la rubia se le iluminan los ojos.

—Pero te cambiarás de ropa ¿no?

Miro a Carter con una ceja alzada.

—No. ¿Por qué lo iba hacer?

—Pues porque llevas una pijama de dinosaurios... —Carter alza las cejas obvio.

—¿Qué? Está muy hermosa así —me defiende Matt levantando su dedo índice —es el dinosaurio más guapa que he visto en toda mi vida. Y creanme, he visto muchos dinosaurios.

—Claro que sí Matthew, claro que sí —Cameron le palmea el hombro —por ejemplo, cuando bebes alcohol ¿no es así?

El rubio le mira con los ojos entrecerrados y todos se ríen.

(.../...)

Golpeo la puerta y a los pocos segundos la castaña nos abre la puerta. Sonríe al verme, pero sus ojos brillan cuando ven a la rubia a mi lado.

Oh, qué bonito te ha quedado la frase.

A mí todo me queda bonito.

—Hola —saludamos los tres a la vez por lo que nos reímos.