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 Cuatro días después

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Cuatro días después...

—¡June!—Mary grita, agitándome—. ¡Ven acá!

El hospital está casi vacío esta hermosa mañana, no podría ser más increíble.

Había trabajado más de veinte horas en los últimos dos días. Trabajando más por mi salud mental que por cualquier otra cosa. El hospital ha sido una terapia para mí, tuve la oportunidad de distraerme de Michael, de Tommy, de Polly y de cualquier otra cosa que me mantenga estresada.

Mis ojos están constantemente en las puertas de la sala de emergencias, en caso de que encuentre a Michael. Me dirijo a Mary, que está sentada en la cafetería con su sándwich y me entrega el mío.

—Es el atún de hoy—dice ella masticando el suyo. Me muevo a la nevera y la abro, eso es para cenar esta noche.

El Sr. Kurt y su amante hicieron un viaje a Londres juntos, prometió llevar a Jojo con él. Ya que cuando llegó a casa el día que terminé de hablar con Tommy, notó que había algo extraño en mí. Así que me hizo mi postre favorito: tarta de manzana y vino tinto.

—¿Todavía no hay respuesta de tu chico?—pregunta, a mediados de masticar.

—Todavía no hay respuesta.

Por supuesto, le había mentido y le había dicho a Mary que Michael se había ido por negocios, no que estuviera en una pausa, huyendo de los italianos y que iba a asesinar indefinidamente a Hughes.

Debía llamarme, le dije a Mary, llamarme y decirme cuándo volvería, o si lo haría.

—¿Cómo está tu hijo?

Cierro la nevera y me dirijo a la mesa. Cojo uno de sus palitos de zanahoria y lo mastico, dirigiéndome hacia la puerta.
Tengo permiso para irme pronto, y si Dawson me atrapa en la sala de descanso, tendrá un maldito ataque.

—Oh, él está bien. Es un adolescente, malcriado. Huele a olor corporal y a cigarrillos. Lo atrapé acariciando a su compañero.

—¡Whoa!—me río—. Mary, no puedes decirme estas cosas. Conocí a Paul cuando era un bebé.

Me estremezco, asqueada.

—Necesito que sientas mi dolor—suplica, cubriéndose la cara con las manos, se ríe—. Oh, Juney, fue absolutamente asqueroso.

—Puedo imaginarte, pobre. Voy a hacer mis notas. ¡Gracias por la cena!

—De nada cariño. En cualquier momento.

Salgo de la habitación y al instante choco contra algo más fuerte de lo esperado.

Casi cayendo hacia atrás, los brazos fuertes me agarran, asegurándome de que no caiga. Lo miro y al instante siento que mi ritmo cardíaco aumenta.

𝐓𝐎𝐔𝐆𝐇 𝐋𝐎𝐕𝐄 ━ MICHAEL GRAYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora