015 (Tell me its a lie)

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—JiHo, quiero que te pongas de pie, lentamente, cuando despiertes habrás olvidado todo lo que acabas de contarme respecto a ese sueño, se encadenará a tu inconsciente de nuevo y no tendrás acceso a él, ni en sueños, no recordarás nada sobre estar en el piso, ni acerca del shock, en este momento estamos despidiéndonos y no recordarás otra cosa en cuanto chasquee los dedos... 



—Muchas gracias, entonces, con permiso—. 

La sonrisa en su rostro se dibujó como si nunca hubiese pasado nada. 

Apenas el chico abandonó la oficina, Jisoo se dejó caer en el sofá. 


No podía creer nada de lo que acababa de pasar, hipnotizó a un chico sin su consentimiento y hurgó en los pasajes más profundos y oscuros de su mente. 

Lo que encontró no le gustó ni un poco, en realidad era difícil de creer y desafiaba cualquier ley de lógica. 

No era posible, no era posible, pero era cierto, el inconsciente no miente, y JiHo no había llegado ahí por su cuenta propia, alguien más lo hizo... 


Joshua bajó peldaño a peldaño como si sus zapatos pesaran diez kilos cada uno. 


Al llegar al piso donde se encontraba JunHui, pudo observar desde las escaleras cómo al chino le destellaba una enorme sonrisa en sus labios, demonios, su sonrisa era tan radiante y espectacular, y esa sonrisa ahora tenía un nuevo motivo. 

Ellos dos venían caminando a pasos alineados sin despegar sus ojos el uno del otro, WonWoo y JunHui. 

Cuando cruzaron a Joshua en las escaleras, ambos borraron sus sonrisas lentamente al notar al chico apagado. 

Claro que no sabían el porqué de su rostro, en realidad estaba más asustado y ansioso por lo que había pasado con su paciente. 



Esa noche tenía muchas cosas en la mente mientras JunHui conducía el auto a casa. 

Joshua iba serio, apenas pestañeaba y constantemente se mordía el labio. 


— ¿Qué te dijo JiHo? —. 

—Uhm, nada interesante realmente—. 


¿Qué sentido tenía contarle? Iba a quedar como loco, y estaba cansado de la compasión de JunHui, de que insistiera que no podía manejar su trabajo y su capacidad emocional y física... 

Aunque realmente tenía razón, ya no sabía cómo explicar que cada día se sentía más cansado y débil. 



A la hora de la cena ninguno de los dos hablaba, se dedicaban cada uno a degustar su propio plato, JunHui con la mano en el teléfono respondiendo mensajes a quién sabe quién (aunque Joshua sabía realmente de quién se trataba) y Joshua picando su comida sin comer demasiado. 


JunHui finalmente notó la mirada de Joshua situada en sus ojos y el americano la desvió rápidamente. 


— ¿Pasa algo Josh? —. 

Jisoo curvó una dulce sonrisa moviendo la cabeza lado a lado. 

We promised a forever ✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora