9. Llegada

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Narra Gustavo:

Apenas aterrizado el avión, ya quería bajarme. Cogí mi mochila y estaba listo para correr. Lástima que para salir tenía que esperar a que los otros pasajeros de delante lo hagan.

—No pueden estar demorando tanto, ¿qué pasa? — hablo en voz baja mirando (o tratando de mirar) la salida a través del tumulto.

—Tranquilo amigo, ya tendrás todos los días para verla— El intento de tranquilizarme de Thomaz, hace que me ponga más tenso.

Al cabo de diez minutos el área empieza a despejarse. No sé por qué tardaron tanto, pero ya importa. Thomaz y yo salimos a recibir las maletas y tomamos un taxi para llegar al hotel que reservamos antes de partir.

Entramos al cuarto y lo primero que hago es darme una ducha rápida. Tiempo es lo que menos puedo perder.

—Oooye, ¿a dónde vas tan vestido y perfumado? — pregunta Thom al verme

— ¿No es obvio? A ver si la suerte o el destino conspiran a mi favor y me ayudan a encontrarla— me arreglo el cuello de la camisa que llevo puesta

—Pero ya es tarde, hombre... Además ni siquiera sabes en dónde vive.

—Exacto, pero dos cabezas piensan mejor que una— Tomo mi celular y las llaves del cuarto

—Estás insinuando que...

—Irás conmigo.

—Oh, ¿no puede ser mañana? Estoy cansado— se estira en la cama

—Thomaz, no estás ayudándome— el nombrado se levanta a regañadientes, pero al final accede. Salimos a la calle principal que está al frente del hotel y a pie recorremos las calles de su ciudad. Es un poco pequeña a comparación de Sao Paulo, pero me gusta.

Pasamos por parques, alamedas, callejones claros y oscuros y en ningún lado hay rastro de ____. Me siento triste, pero no debo sentirme derrotado, mañana iré a buscarla; así será hasta encontrarla.

Nuestra última opción fue entrar a uno de esos Malls. Nos sentamos un rato ya que estábamos cansados de caminar tanto sin descansar.

—Acompáñame al súper, quiero comprar algo— Thomaz se levanta después de haber escuchado el aviso de que en 30 minutos cerrarán la tienda, yo lo sigo, sin nada más que hacer. Entramos a la sección de cuidado personal, Thomaz observa los dos frascos de shampoo que tiene en ambas manos. ¿Qué tan difícil es escoger un shampoo para hombre?

— ¿Éste o este? —dice y yo ruedo los ojos

—No lo sé, el que más te llame la atención, supongo.

—No Gustavo, se escoge el shampoo por la calidad, no porque tiene un bonito envase— estoy a punto de responder, cuando de pronto, las cajas de tintes caen en fila y dejan ver a la persona que los hizo caer. Ambos nos quedamos atónitos, boquiabiertos al darnos cuenta de quién es esa persona.

— ¿Martina? — pregunta Thomaz enfocando toda su atención en ella.





UFFFF MEN, ESTO SE VA A PRENDER DEMASIADO 🔥🔥🔥🔥

LOCA POR ÉL II: Destinos encontrados (Gustavo Daneluz y tú) -CANCELADA-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora