||No Fix||Nightcross||

VI

Nunca odié tanto ser hijo único hasta ahora. Creo que nunca había notado cuan solo estaba hasta que...bueno, lo estuve.

Saben, es decir, vacaciones.

Dos semanas bastante significativas en las que me dediqué a analizar mi vida. Y me descubrí a mí mismo extrañando la escuela, o al menos anhelando las llamadas de Nightmare, hasta que terminaron.

Sí, terminaron.

Y no porque hayamos peleado o el aburrimiento nos dominara.

Fueron dos semanas, catorce días, catorce llamadas... ¿No es raro?

Es decir, no era raro en ese momento, pero, ahora que lo pienso más profundamente, ¿eres mi novio acaso? ¿Por qué me llamabas todos los días preguntándome por lo que hice cada segundo del día?

¿Saben que fue lo único que se le olvidó preguntarme? Cuantas veces iba al baño.

Muy bien, estoy tratando de ser serio sobre esto, pero, creo que parezco un tonto riéndome solo junto a una bola de niños reunidos en grupitos.

No sabes lo difícil que fue tener que despertarme temprano para volver a esta prisión llena de libros y reglas, pero, creo que estoy feliz por eso. Espero que puedas llegar a tiempo antes de perder el autobús o le diré al chofer que aceleré si te veo corriendo tras nosotros.

Lo juro.

Ah, ya te vi. Tú, tu hermano y todas tus intenciones por lanzarte encima de mí.

Me hice para atrás, interrumpiendo la plática de dos chicos al meterme entre ellos. El chino de nuestra clase y el sabiendo amante de las serpientes. Ese tipo daba miedo, no hablaba de nada más que serpientes.

Yo me disculpé con ellos, pero Nightmare les pasó encima sin siquiera mirarlos.

Amigo, ¿de qué sirve que yo me disculpe si tú vas a pasar como si fueras la realeza?

De seguro y ya les caemos mal. De seguro les caemos mal a todos por pisarles los pies y empujarlos a la calle en una muerte segura en medio de nuestra persecución antes de subir al bus.

Qué manera de empezar el año.

Pero estabas feliz de verme y yo feliz de verte así que-¡Deja de patearme el asiento!