{Seguimos caminando hacia casa, Jesús me va agarrando de la cintura ya que tengo frío}
Jesús: ¿Sigues teniendo frío?
Yo: Si bueno, ahora estoy muy bien. Gracias a ti, claro.
Jesús: Sigues igual de enana que siempre ¿Eh? JAJAJA.
Yo: Soy bajita pero tampoco soy tan enana.
{Le miro hacia arriba de reojo.}
Jesús: Bueno bueno, lo que tu digas.
{Me da aun achuchón.}
Yo: Además, las bajitas con los chicos altos quedan muy bien ¿Verdad Jesús?
{Le sale una sonrisita de avergonzado y agacha la cabeza.}
Jesús: Claro.
{Llegamos a casa, abro la puerta, son las 22:45, saludamos a nuestros padres y subimos a la habitación donde esta Dani, comiendo helado.}
Jesús: ¿A ti no te dolía la tripa?
Dani: Cállate que gracias a mi has pasado la mejor noche.
{Le miro a Jesúsy veo que le mira a Dani con cara de asesino por lo que ha dicho.}
Yo: Ahora vengo, voy a ponerme el pijama.
{Salgo de la habitación y oigo que empiezan a hablar, así que me quedo cerca de la puerta para escucharlos.}