El dragón y el bastardo

Escamas: Parte 9

-Ey... ¡Ey! ¡Levanta!
La suave voz de Elyzabeth me despertó. Miré por la ventana desde la cama y, para mi sorpresa, todavía era de noche. Un rayo de luz blanquecino entraba por la ventana, iluminando mi cara.
-¿Que pasa?
-Un hombre ha venido a buscarte, Scott

¿Un hombre? ¿Quien querría buscarme? No sabía si esto me gustaba o no. Podría ser mi padre... O alguien que quiere matarme. Decidí no pensármelo mucho y levantarme. Me vestí y corrí por el pasillo. Una sombra a caballo aguardaba en la puerta.

-Sube- Decía en tono amenazante una voz de mujer ronca. -No hay tiempo
-Pero... ¿Y Albert? ¿Y Elyza?- Dije tembloroso
-Estarán bien.
-Albert se viene, es mi mejor y único amigo
-Vale, pero hay mucha prisa. Vamos.

Corrí a despertar a Albert. No había preguntado quien era ni que quería. Me siento estupido.
Cuando estábamos listos fuimos hasta el patio montados a caballo.

Cabalgamos en silencio hacia El Norte durante un buen rato

-¿Quien eres? ¿Que quieres? ¿A donde nos llevas?- La chica se rió entre dientes
-Soy Maya Bolton, te llevo a desembarco del rey, tu hermana te espera. Tampoco puedo decir mucho más.

Arropados por el frío abrazo de la noche, cabalgamos durante lo que pareció una eternidad hasta llegar a las puertas de Desembarco del Rey.

-¿Sabéis manejar espadas?
Los dos asentimos.
-Las necesitaréis, esta esta a rebosar de Lannisters, están invadiendo este sitio.

Maya sacó un cuerno de las alforjas y lo hizo sonar. Las puertas se abrieron con un ruido metálico, revelando un ejército Lannister quemando y saqueando las casas que había todavía en pie.

Hala, pues eso. Si a alguien le interesa, esto se escribió mientras se escuchaba a los Avett Brothers y a Foxy Shazam. Bueno, ¡Hasta la próxima!