Por Yolanda
Desde que nací mi destino fue el de sufrir, mi nacimiento no trajo a mis padres felicidad. ¿Que como lo se?, pues me abandonaron en un orfanato para que alguien mas se ocupara de mi y aunque estoy agradecida con mis padres adoptivos, no soy plenamente feliz con esto.
Oh perdón por no presentarme, mi nombre es Yolanda Gomez o al menos es el apellido que recibí de mi padre adoptivo, soy una chica común y corriente con una historia de vida algo dura, tengo 17 años, mi cabello es castaño liso, mis ojos cafés claros de pestañas largas, me considero chaparra aunque mido exactamente 1.67 m.
¿Quien pensaría que todo estaba por cambiar al conocer a Alexa?
Déjenme contarles... Todo paso el año pasado, cuando comenzaba el año escolar.
Un nuevo año es sinónimo de nuevos compañeros, eso siempre pienso cuando llega el primer día de clases, nunca he sido de muchos amigo, se preguntaran ¿por que? pues para que lo sepan soy algo introvertida y me es muy difícil hacer amigos y si no me creen pueden preguntarle a mi novio Elian, lo conocí cuando empezaba la secundaria y gracias a que se fijo en mi y no se rindió hoy esta conmigo porque de lo contrario seguiría sola, en este caso no fue así como conocí a Alexa pero sin embargo siento que algo raro tiene que me llama la atención es como si algo nos conectara y por esa razón la conocí.
Como ya les dije fue hace dos años el primer día de clases, yo llegue con mi novio en la moto como rutinariamente lo hace, me baje y por ser torpe como siempre le pegue a alguien que iba caminando atrás con el casco haciendo que se enojara, al fijarme que le había pegado a alguien voltee a mirar y pude ver que era una chica pelinegra, de ojos negros y su estatura mas baja que la mía, tenia un semblante triste y enojado a la vez y eso me llamo la atención, ¿que tendrá?
-Oye lo siento, no quería pegarte, fue un accidente- dije disculpándome.
Ella solo sacudió su cabeza y siguió su camino, nunca había visto a una chica así, estaba esperando tal vez que me insultase o que me dijera que no pasaba nada, pero todo fue diferente.
-Yoli vamos- dijo Elian sacándome de mis pensamientos.
-Vale vamos- dije siguiéndole el paso.
Cuando llegamos al aula de clase ella se encontraba sentada en la parte superior del salón,yo pase cerca de ella pues me gustaban los asientos de adelante para poder entender mejor las clases así que me senté atrás de ella.
-Oye lo siento en verdad no quería pegarte con el casco en serio!- dije de nuevo me disculpe por lo sucedido.
-Tranquila, no dolió, solo no estoy de humor- dijo sin voltear a verme.
Podía apostar que estaba llorando sobre su puesto, pero no quería molestarla mas así que ignore eso y seguí mirando al frente.
(...)
-Yoli ¿has visto a la chica nueva?-Pregunto Elian cuando salíamos a receso.
-Si, da miedo- dije sin pensar.
-No me refiero a eso- me dijo y señalo a la mesa donde se encontraba sentada.
-Aaa si, no tiene amigos, como yo- dije recodando cuando era nueva en secundaria.
-Si y ¿que piensas si le hacemos compañía?- dijo mirándome.
Nos sentamos con ella, al principio no hablaba y tan solo nos observaba pero eso duro muy poco hasta que Elian empezó a contar chistes.
Era rara y a la vez era muy tierna, era como si fuera una pequeña niña sola y que acaba de entrar a su grado de pre-kinder. Estaba a gusto de haberla conocido.
Así paso todo el día y cuando llego la hora de salida pude ver que si semblante cambio, ya su cara mostraba tristeza y su amable sonrisa se esfumo.
Esta chica me dio curiosidad, ¿que historia se esconderá detrás de esa cara triste?... Eso solo lo sabría haciéndome su amiga.
(...)
Y bueno acá estoy dos años después y tengo su amistad, conozco a sus padres y la verdad me parecen una amor de personas, pero ella sigue de vez en cuando con su cara triste y distante, así ella lo niegue se que ella no esta bien.
Nunca admite como en realidad se siente, nunca demuestra mucho cariño, es seria pero se ríe en los momentos de diversión, es falsa al mostrar su sonrisa y lo único que me llego a contar la vez que la vi llorar fue que espera a un chico que no puede olvidar y nunca lo hará, también dijo su nombre pero ya no lo recuerdo.
¿Quien sera aquel chico que no puede olvidar?... ¿Por que se pone triste cuando habla de el o lo recuerda?.
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¿Por qué no me miras?
Roman pour Adolescents¿No te ha pasado que el que te gusta no te mira de la forma que tu quieres, si no como una simple chica obsesionada con él? Esta es la historia de Alexa, una simple chica de secundaria obsesionada con Jhan el cual ha sido su crush desde que comenzó...