Un Heredero Para El Demonio (paperhat)

01

Era un día bastante nublado, incluso parecía amenazar con un tormenta, lo que resultaba increíblemente adecuado para la celebración que se llevaria acabo aquel día por la noche en alguna de las islas dominadas por algun villano. Nada más y nada menos que la fiesta de cumpleaños del mismísimo black hat, el cual si bien era una incógnita en cuanto a números, era la más esperada cada año, asistiendo la mayoría de los malévolas y ruines almas despiadadas, con el fin de degustar una buen celebración.
¿Y como no?, Sí el mejor villano merecía la mejor fiesta, la cual hospedaba a los invitados desde un día antes de ser necesario en las instalaciones de aquella basta extensión de tierra con increíble edificios, pues está isla era propiedad de la mismísima familia de los hat's. Los principales integrantes de la organización se alojaban en el edificio principal, siendo su estancia en el piso más alto, seguido en la parte baja el gran salón que daría lugar a aquel ya mencionado acto, mientras que solo los más destacados villanos, claro después de black hat, ocupaban los siguientes pisos, con la condición de no meter sus narices antes de la hora citada en el primer piso, o habría consecuencias. Y el resto, a los que black denominaba "villanos de segunda", se quedaba en los edificios consecuentes.

Era pasado de medio día, por lo que un atareado doctor se encontraba agilizando a algunos hat bots, para las decoraciones y otros empeladuchos ( como el llamaba a los de catering, meseros etc.) con el fin de que su cabeza no fuera la que volará si algo salía mal, todo debía ser perfecto y el tenía que asegurarse a un 120% que así sería.
-¡¿Ya está lista la mesa de postres?!, ¡Como que no!, ¿Y que hacen descansando?, aguecando lala de aquí insignificantes cocineros, si si la fiesta comienza a las 8 de la noche pero por todos los demonios, ¡No me interesa! tienen una hora, ¿escucharon?, ¡U-na horaaa!, Y el que no le gusta se puede ir a la chi...nampa de sus madres ¿¡OYERON!? -vaya que el científico le había aprendido algo a black hat, pero no se podía culparlo, estaba en juego tanto su integridad física como psicologica

Mientras por otro lado demencia estaba bajo amenaza de muerte a que no saliese de su cuarto hasta la hora de la fiesta,debido a que si algo le conocía el de sombrero de copa, es que esta chica maniática atraía el caos donde posara un pie ocasionando un desastre,¡y por un demonio!, el no tenía tiempo para arreglar ni un condenado desastre.
Así que el de piel oscura tambien dejo a 505 con una sola misión, impedir que la loca saliera, pues si bien la había amenazado, está aveces le resbalaba lo que el decia.¿ Y la cereza en el pastel?, Dejo 3 hat bots en la puerta del cuarto de la chica, el cual por cierto, tenía rejas electricas en la ventana, este esperaba que fuera suficiente para un deternerla un rato.
-tu ve tranquilo bombón- si, eso había dicho, pero cualquiera con más de 3 neuronas no estaría tranquilo ni aunque esta estuviese en la cárcel más segura del jodido planeta

Por último el queridisimo, elegante, desquiciado,supremo y más malvado villano de todos los tiempos, black hat (hay que echarle ganitas a las presentaciones ¿no?).
Como era costumbre de todos los años antes de la fiesta black se encerraba en su habitación por algunas horas preparando su discurso sobre el, y su por supuesto exitosa organización, dijida por OBVIAMENTE el, y las grandiosas asañas que está logro gracias a él. Un discurso bastante humilde diria el demonio.

Se dieron las 18:30 y como el intinerario lo marcaba, el demonio con sombrero previamente alistado con su fino smokin bajaba a revisar que ya casi todo estuviera a punto de oro, posandose en la entrada de aquel sitio que a su parecer lucia a bastante preparado para "tirar la casa por la venta", como él solía decir.
Mesas cubiertas de finos manteles color vino rodeada por aquellas sillas de color negro como la noche y por supuesto en su centro adornado con floreros llenos de rosas tanto rojas como negras. Un piso pulido con bastante dedicación, en especial el centro del salon que era rodeado por las mesas dejando el espacio merecido para un buen baile. El pequeño escenario que se posaba al final del salon enfrente de las mesas, listo para recibir al dueño de la celebracion y a los alrededores docenas de meseros listos en sus estaciones para servir a los cientos de villanos.
Sin embargo había un pequeño detalle, un pequeño insignificante y molesto detalle que a su parecer contaminaba todo ese fino ambiente

-¡FLUG!, VEN AQUI CIENTÍFICO DE PACOTILLA- sin moverse un centímetro el demonio había ocasionado que el científico soltara un chillido y pegará un brinquito, seguro que el pobre estaría rezando todo los sermones que se supiera, aunque no fuera para nada creyente mientras corría en dirección hacia el de sombrero, tomándole menos de un par de segundos, ni Speedy Gonzales lo superaba en aquel momento

-En..en que soy bueno jefesito- soltó con un aparente miedo el de la bolsa esperando que su sufrimiento fuera rápido

El de piel oscura sonrio en sus adentros por el notable miedo que mostraba su contrario, pero rápidamente recordó por qué lo reprenderia- ¿Qué hace con esa estúpida bata puesta, a visto que hora es doctor?- insinuó dándole una mirada evaluativa que derrochaba desaprobación y aparente molestia

-Bu..bueno jefesito chulo, esque y..yo estaba asegurándome que estuviese todo perfecto aquí abajo, pero...

-¡Nada de peros doctor!, Se larga inmediatamente a cambiarse esos trapos sucios de sirvienta, que dirán los demás villanos y científicos si lo ven así, tengo una reputación y usted lo sabe, así que ¡FUERA DE MI VISTA!-grito soltando lo último casi con un asentó asesino y gutural como cada que lo sacaban de sus casillas

-Porsupuesto jefesito de mi vidasa, solo no me haga bilis- y más rápido que un flash el de piel blanca salió disparado a su cuarto, siendo visto hasta que esté se perdió por su jefe quién soltó una sonrisa "malvada" inconcientemente, pero bastante discreta al verlo marchar

-¡Espero que todo esté listo bola de cucharadas inmundas! O volaran algo más que solo cabezas