Sonó el timbre y fui a abrir. Abrí la puerta y me encontré con.... ¡Increible!
Emily
Era Alex. Cerré la puerta inmediatamente al ver que era el, pero como el ya se esperaba mi reacción puso el pie entre la puerta y el marco para que no pudiese cerrar. Consiguió entrar ya que empujo la puerta y el era mas fuerte que yo.
-¡Fuera de mi casa! -Le dije enfadada empujándole hacia la puerta.
-No me pienso ir hasta que me perdones, Emily, fue sin querer yo no sabia nada sobre que te daba miedo el agua, nunca me lo contaste. -Me incrimino.
-Oh vaya, perdona por no contarle mi vida entera a la primera persona que se le pincha una rueda delante de mi casa. Yo no le cuento mi vida a cualquiera. -Le explique.
-Emily no soy cualquiera al que se le ha pinchado la rueda delante de tu casa. Te recuerdo que e salvado tu casa de que se quemase y te cure cuando te quemaste. Y el otro día dijiste que eramos amigos. Oh y también he dormido contigo. -Dijo acercándose a mi mientras yo me alejaba hasta que me choque con la pared.
-¡Ni se te ocurra acercarte ni un paso mas! -Le dije enfadada. -Yo no dije que fueses mi amigo, lo dijiste tu. -Le contradije.
-Oh vaya, perdona por creer que eramos amigos cuando accediste a que fuese tu héroe. -Me inculpo.
-No copies mis palabras. Me pillaste con las defensas anti-idiotas bajas, estaba llorando y me sentía mal, fue una estupidez. -Me defendí.
-¿Realmente crees que es por eso? o porque te gusto. -Me preguntó mirándome fijamente a los ojos, mientras se acercaba a mi y apoyo sus brazos a los lados de mi cabeza. Me agache y me fui hacia la derecha para salir de su trampa.
-Es por eso realmente. -Le conteste y el se giro para mirarme.
-No me lo creo. -Dijo el.
Me acerque a el. -Vete de mi casa.
-No. -Respondió firmemente.
-¡Argh! -Gruñi pegándole puñetazos en el pecho.
Extendió los brazos. -Desahógate. -Este chico era idiota ¿Me dejaba pegarle?
Le pegue unos cuantos puñetazos mas y le arrastre hasta fuera de mi casa. Cerré la puerta de golpe mientras el decía. -No, espera, Emily. -Casi no le dio tiempo a acabar cuando ya había cerrado la puerta.
Me volví a sentar en el sofá para ver la tele y relajarme después de la pelea con Alex. Oí un ruido pero pensé que seria Alex yéndose a su casa.
Oí la voz de Alex muy cerca y me levante rápidamente del sofá mirando hacia la puerta de la sala donde se encontraba el. La pelea aun no había terminado.
-¿Como has entrado? -Pregunte asustada.
-Por la ventana de la cocina. -Me informo sonriente.
-Borra esa sonrisa de tu cara o te la quito yo. -Le amenace.
-¿Como? ¿Dandome un beso? -Pregunto desafiante y acercándose a mi.
-No, dándote una ostia. -Solté una falsa carcajada. -Te encanta soñar despierto ¿eh? -Contra-ataque. -Veo que no entendiste mi mensaje, quiero que te alejes de mi. -Le dije.
-Claro que lo entendí, no soy tan tonto, pero no estoy de acuerdo asi que no lo haré. -Me explicó el.
-No me importa, quiero que te vayas de mi casa. Ahora. -Le exigí.
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Enamorame, si puedes... © (EDITANDO)
Teen FictionEmily siempre se ha considerado una adolescente normal, con una familia, dinero necesario para vivir y unos estupendos amigos. Solo que con una pequeña diferencia, ella no cree en el amor, a diferencia de una de sus mejores amigas Leslie, lo cual le...