2▪Always You • Brendon Urie | TERMINADA |

29. Se verán cosas, dice la Biblia.

Eso sí que había sido completamente extraño. Al Sarah acercarse a mi y hablarme como si nada hubiese pasado era de lo más desconcertante que hasta dudé que esto fuera real. Me comentó el hecho de llevar el divorcio con mucha tranquilidad y madurez, que entendía que el amor se habia venido apagando muy lentamente desde hace años y era mejor separarse antes de seguir haciendo infeliz al otro, que había intentado llamarme o escribirme pero que tenía miedo a que yo la rechazace o simplemente la ignorase, bueno, a este punto si ella me hubiese llamado no sabía que habría hecho.
Sin embargo, me quedaba aún la duda de que si sabía lo mío con Brendon.

Caminamos junto con Maya hacia el jardín, la marcha nupcial era tocada por un cuarteto de cuerdas, todos miraban a la hermosa novia que pronto se convertiría en la señora Pawlovich. Realmente les deseaba toda la felicidad del mundo y esperaba fervilmente que su matrimonio prosperara para que no cediera al olvido como el de Sarah y el mío.
Yo era la primera y sinceramente andaba lo más desorientada posible. No sabía dónde ni cómo nos colocariamos al llegar frente del altar porque lógicamente no había asistido a los ensayos, no entendía el porqué Sarah no había sido la primera dama de honor, ambas habían estado muy cercanas la una con la otra en este tiempo de mi ausencia y no fue hasta que lo pude observar a la par de Dan, con un traje negro y una pajarita en el cuello, si ella hubiese estado de primera sería la pareja de Brendon en el baile, eso sí me había comentado Dan, las madrinas y los padrinos se moverian alrededor de los ya entonces esposos en su primer baile.
Maldita sea. En ningún momento bailaria con él.

Daniel se miraba tan feliz, no dejaba de mostrar los dientes al ver a Maya, puso su mano tapando su boca y volvió a soltar una risilla.
"Idiota"- pensé con cariño hacia mi mejor amigo.
Moví la mirada evitando encontrarme con la de Brendon y observé a quien estaba a su lado izquierdo, Kenneth lucía igual que siempre, algo se movió en mi estómago cuando me dedicó una pequeña y burlona sonrisa.
"No caigas otra vez, estúpida"- pensé.
Recordé cuando lo había visto casi en la misma posición poco más de dos años atrás, se me había derretido el corazón al verlo secar las lágrimas que se le escapaban con un pañuelo, fue uno de los dos momentos más felices de mi vida y para bien o para mal, agradecí que hubiese pasado.
Llegamos al frente, yo me posicioné de primero y después Sarah para luego llegar Maya de la mano de su padre y ser entregada a Dan, esta me entregó su ramo, sonrió melancólica y giró denuevo.

No había cruzado miradas con Brendon pero la sentía fija en mi durante cierto tiempo. Kenneth había cambiado su expresión drásticamente por lo que ahora estaba con las manos agarradas enfrente y con su boca formando una línea recta. Podía ver por el rabillo del ojo como Sarah de vez en cuando se removía incómoda y pasaba el pequeño ramo de una mano a la otra.
De vez en cuando Dan me miraba y sonreía, yo le devolvía la acción.
Nunca lo había visto tan feliz. Ni cuando su colección de todos estos años llamada "Fotos de otro planeta" en la que estaba siendo poseído por alienígenas había alcanzado la cantidad de seiscientas sesenta y seis.
Bestia él.

Dan besaba a Maya, la ceremonia había terminado y ahora eran esposos. Bajaron las pequeñas gradas llenas de grama primero para después salir nosotros en pareja. Contuve el aire cuando un dedo de Brendon rozó con el mío. Ajusté con la mano recién bendecida por la persona que iba a la par mi agarre del ramo para alejarla lo más posible.
Casi no podía respirar, no lo había visto fijamente pero sabía que en algún momento lo haría.
Todos gritaban alegres y lanzaban pétalos, yo no podía evitar pensar cuando salí de un lugar asi con una sonrisa en la cara mientras Kenneth y yo éramos bañados en pétalos de rosas blancas.

Habían sido el minuto más tensos e incómodos de mi vida, al llegar al salón rápidamente me dirigí al baño.
Tiempo después salí y tomé del cuarto de la novia la cámara que la había dejado guardada ahí. Estaban todos alrededor de quienes supongo eran los ahora esposos, primeramente divise donde estaban ellos dos para no ponerme a su lado por equivocación­­­; podia ver la espalda de Brendon en el lado derecho, podia visisar esa espalda o su sombra a kilómetros de distancia mientras que Kenneth se encontraba en la izquierda.
Ya qué... sería enmedio.
Como siempre. Enmedio de todo.