Miércoles, 11 de julio del 2018.
Gianluca se encontraba decidido esa vez, ese era uno de los pocos días en los que veía a su madre y debía de aprovecharlo. Estaba exhausto al no poder recurrir a alguien más, pero no le molestaba decir que su madre era su mejor opción y su mejor consejera.
- Mamá. -Llamó a la mujer que estaba mirando televisión. Pocas eran las veces en las que ella podía tomar un descanso de su labor como maestra jardinera.
- Cariño... -Carmen lo miró con ojos cansados pero sonriente. Aún portaba su delantal de trabajo- Ven, siéntate. -Con sus manos hizo ademán para que éste se sentara.
Gianluca obedeció, apoyó su cabeza en las piernas de la mujer y ésta comenzó a acariciarle el cabello. Gianluca sonrió a forzadas. Extrañaba eso. No solía ver a su madre y eso era todo lo que él necesitaba.
- ¿Qué sucede? -Preguntó Carmen Márquez, luego de unos segundos.
Gianluca cesó con el cariño y se reincorporó al instante. - Tengo un problema.
- ¿Te gusta alguien? -Preguntó ella, casi sonando como una afirmación.
- Uh, algo así. -Se sentía incómodo ante la mirada penetrante de su madre.
Hubo silencio de varios segundos.
- ¿Nunca te ha pasado de sentir que de tanto rencor la cabeza te va a estallar? Me estoy sintiendo así ahora y...
- Sentir rencor está mal, amor. No tienes que estar dolido con el mundo, y la mejor cura para la presión en el pecho es perdonar.
Sintió su corazón palpitar fuerte.
- Siento que... Quiero perdonarle, pero no puedo. Recuerdo que me ha mentido y me quema, mamá. -Sintió sus ojos arder- ¿Por qué me tuvo que gustar? ¿Por qué no me ignoró como las demás personas siempre hacen conmigo?
Carmen sonrió y le dijo;
- Porque algún día, alguien iba a notar el destello de luz que eres por dentro y caería loco por ti. Esa persona fue más inteligente que los demás porque supo conocerte, y aún así... Quedarse junto a ti.

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Tu poesía
ContoAdriel es un escritor frustrado que cree inalcanzable que algún día pueda llegar a dirigirle la palabra al chico tímido del salón. Su única salida en ese lío de sentimientos dispersos en su cabeza, es recurrir a los mensajes vía teléfono celular. O...