El trayecto

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Se había que dado un silencio agradable en el coche, mis pensamientos solo rondaban por las palabras dichas por el rubio haciendo que me sonrojara y desviara la mirada hacia la ventana, volviendo a imaginar cosas que aun no habían pasado y que querían que pasaran en este mismo instante

-Sabes la espera es una gran virtud- formulo el rubio mientras se paraba en un semáforo

-Si-respondí sonrojado al ser descubierto por mis pensamientos

-Pero no voy a negar que estoy igual que tu-dijo mientras colocaba su mano derecha en mi muslo provocando que un escalofrió recorriera toda mi espalda al mismo tiempo que su mano bajaba y subía por él, las caricias no se detuvieron aun cuando el coche se puso en marcha, solo pude retorcerme en mi asiento ante las caricias que recibía pero hubo una que me hizo gemir, cuando su mano paro en mi entrepierna dándole leves apretones que solo me hacían gemir cada vez mas alto, lo cual intente cubrir mis gemidos con mi manos. Pero al parecer eso le molesto porque apretó mas fuerte hasta que quite mis manos de mi boca

-Sabes, me gusta oír tus gemidos-indico antes de besar mis labios enfrente de otro semaforo

-Ahg-respondí en el beso-¿Estamos lejos de tu casa?-hable cuando nuestros labios se volvieron a separar

-Quien sabe-respondió mientras se alejaba de mis labios no antes de que con sus hábiles dedos bajara la cremallera de mis pantalones y colocara su mano dentro de mis boxer lo cual hizo que soltara una exhalación por lo echo y me retorciera en el asiento

-Albert-dije entrecortadamente

-Solo te he tocado un poco y ya estas así- hablo son una sonrisa de superioridad, a lo cual volví a gemir -Es que aaaah-intente decir pero su dedo en la ranura de mi polla hizo que me detuviera

-Si sigues así-gruño mientras volvió a poner el coche en marcha-No llegaras a la casa sin antes ser tomado por mi-volvió a gruñir mientras daba pequeñas sacudidas a mi miembro

-Albert-anuncie mientras mordía mi labio para detener los sonidos que salían de mi boca

-Chris,Quítate los pantalones-decreto mientras sacaba la mano de mi pantalón para volver a ponerla al volante. Tras dos grandes suspiros hice lo que me demandó, baje mis pantalones junto con mi ropa interior sintiendo la tapicería de cuero del coche debajo de mi, desvíe la mirada hacia el rubio, el cual estaba concentrado en buscar un callejón o un sitio donde no hubiera gente de paso y fueran testigos de lo que estabamos a punto de hacer, subiendo los colores de ser descubierto por cualquier transeúnte que estuviera por allí sacandome un gemido y atrayendo su mirada azul.

-Albert, te necesito-hable entrecortadamente recibiendo un gruñido y su mano cerca de mis labios

-Chupa-ordenó mientras rozaba sus dedos en mis labios. Obediente metí sus dedos en mi boca lamiendo y succionando mientras imagiba que era la anatomía del hombre que me acompañaba, oi un gruñido áspero y entrecortado salir de la garganta lo cual hizo que intensificará más los movimientos que estaba haciendo con la lengua. Tan concentrado estaba que no me había dado cuenta de que el coche se había parado en un callejon, hasta que sentí como el sinto se separaba de mi y era atraído hacia el cuerpo de mi acompañante.

-Albert-gemi en sus dedos

-Muy buen chico-susurró en mi oido antes de lamer lo y sacar sus dedos junto con algunos hilos de saliva de mi boca

-¿Quiero...?-intenté decir mientras colocaba mi mano derecha en su entrepierna y me mordia el labio inferior junto con un leve movimiento de caderas

-Chris-gruño mientras hacia para atras el sillo con una de sus manos, para luego dar leves golpes en sus muslos indicando que me subiera en ellos cosa que no tarde en hacer al igual que atacar su boca borazmente, haciendo que gruñera por cada movimiento circular que hacian mis caderas a su miembro en cautiverio. Separo nuestras bocas con un sisperio

-No deberías jugar con fuego- demando entre gruñidos

-Y que me lo impide- lo volvi a besar con exigencia, recibiendo una nalgada y una separación de nuestros labios

-Por que creo que quieres ser preparado antes de tenerme dentro- gruño en mi oido antes de embestir me con dos de sus dedos haciendo que cualquier réplica o queja mia muriera entre mis labios. Sentí como mis paredes eran estiradas por los movimientos en tijera que estaba haciendo lo cual no podia parar de gemir en su hombro

-Albert- grite cuando añadio dos dedos mas a mi interior dando fuertes embestida que hacían que gimira y gritara como si no hubiera un mañana

-Chris, Si sigues asi no podre terminar de prepararte- anunció entrecortadamente

Ante la advertencia yo solo pude separarme un poco de su cuerpo para quitar los botones de su camisa azul y romper la camisa blanca que me impedía mirar ese formidable cuerpo al igual que su marca de palabras, arrastre mis labios por cortes y palabras borrosas sacando sus piros y gemidos cortas por parte del rubio, hasta que me sentí vacío y sin ningun movimiento en la parte baja cosa que me hizo subir la mirada para ver una sonrisa pica en los labios de mi acompañante que me hizo entender que era lo que estaba por venir

-listo-susurró mientras bajaba la cremallera de sus pantalones y sacaba su miembro

-Si-gemi a la vez que mordia mi labio inferior al ver esa maravilla de miembro
-Entrara-murmure una vez alineados mi entrada y su descomunal mienbro

-Lo vamos averiguar-gruño mientras empezaba a entrar en mi, claro esta que mis gemidos iban a compañados a su gruñidos

-Dios hermosamente estrecho-anunció alegremente mientras empezaba un leve sube y baja

-Y tu demasiado grande-pronuncie mientras escondia mi cara en su cuello a la vez que movía mi cuerpo al son de las embestidas que recibia.
Los movimientos que eran lentos y suaves se volvieron rapido y violentos, los gemidos y gruñidos eran acampañados por gritos que cada ves eran mas altos y los encuentros con mi punto g cada vez eran mas certeros haciendo que el final de esta hermosa aventura en el coche terminara en un glorioso orgasmo para los dos al igual que dos marcas nuevas de propiedad una en el cuello del rubio y otra en mi clavícula.

-Ha sido intenso-jade mientras me alejaba un poco de el

-Sí ya lo creo-murmuró el rubio mientras hacia circulos en mi espalda-Creo que deberíamos irnos a mi apartamento-susurró en mi oido antes de besar mis labios con pasión

-Cierto- dije mientras separaba nuestros labios y volvia a ponerme en el asiento del copiloto para empezar a vestirme.

Las palabras que no se venDonde viven las historias. Descúbrelo ahora