En el límite I

1K 134 20
                                    

Capítulo XXXI

Llevo un par de horas sin salir de la habitación del hotel, y no precisamente por lo agotado que me siento al finalizar el concierto, sino porque de nuevo he caído presa de los sentimientos que tú me provocas. ¿Acaso no te percatas de lo que ocasiona tu cercanía? Sonrío melancólico mientras dejo caer mi cabeza sobre la pequeña mesa, mis manos servían de almohada. Suspiro. Por supuesto que lo notas, y es que nuestras miradas no parecen indicar lo contrario.

Siento el pecho pesado y mi mente pide a gritos descansar, que deje de pensar en ti, pero... ¿Cómo puedo hacerlo cuando aparecen estos videos? Este tiempo en el cuarto sucumbí a la curiosidad y llegué a las grabaciones de nuestras fans, mismas que parecen evidenciar que, lo que sea que ocurre entre los dos, en ocasiones nos sobrepasa y se deja expuesto en cada sonrisa, en cada mirada. Ni tú ni yo sabemos definir a lo que aún le llamamos amistad, incluso sabiendo que hay algo más, pero los EXO-L lo han bautizado como Sebaek o Hunbaek. ¿Cuál te gustaría más, Sehun? Una risa sarcástica se me escapa, ni siquiera sé si es correcto que esté viendo esto.

Pero no pude evitarlo, a pesar de que cada imagen me brinda una esperanza de algo que jamás ocurrirá. El inicio siempre hace que mi corazón se agite y un hormigueo invada mi estómago, sin embargo, conforme pasan los segundos, se van convirtiendo en cuchillas que perforan mi cuerpo y ocasionan que mis ojos se inunden.

Pongo mi atención otra vez en la laptop frente a mi faz, y ahí una nueva escena. Sonrió al recordar ese momento en el que me colocaste una diadema de orejas, no obstante, desaparece de mis labios al notar cómo recorres mi cuerpo con tu mirada cuando te di la espalda. Mi ser se vuelve un remolino de emociones; alegría, molestia, confusión... ¿Por qué sólo no me dices lo que realmente quieres, Sehun? ¿A qué estás jugando? Y lo peor, ¿por qué dejo que lo hagas? Me acomodo en una nueva posición, mis codos recargados en la mesa mientras mi rostro se esconde entre mis manos... Quiero llorar y gritar, necesito desahogar mi frustración.

Desde hace años que dejé de considerarte sólo un amigo, tú por supuesto lo intuiste, ya que yo nunca te lo dije por miedo a que te alejaras. Claro, nuestra convivencia se deterioró pero con el paso del tiempo todo fue como antes. Ahora, así es como te llamo, amigo, aun cuando incluimos los beneficios, y sí, me duele, pero si es lo único que puedo obtener de ti, yo lo acepto, Sehun. Las lágrimas se escabullen...

─ Si tan sólo tú...─ Baekhyun dejó escapar entre sollozos, frustrado, sin percatarse que alguien lo observaba desde el marco de la puerta.

─ Tal vez debes ser tú quien se lo diga.

El mayor rápidamente limpió su rostro y bajó la pantalla de la laptop ante la inesperada contestación. Se levantó de la silla para encarar a su amigo, quien permanecía de brazos cruzados, evidentemente desaprobando la autotortura de su compañero, vestía una camisa blanca y un pantalón negro, muy formal si se comparaba con la pijama del otro.

─ Ambos sabemos cuál será su respuesta, Kyungsoo─ dijo en tono bajo el de cabello claro. El aludido negó con la cabeza cerrando los ojos.

─ Iremos por algo de comer─ informó el pelinegro.

Baekhyun se estiró mirando su alrededor, una cama y un trío de muebles adornaban la pequeña habitación, junto con unas lámparas; no se sentía con ánimo para salir.

─ Creo que me quedaré.

─ Necesitamos comer para reponer la energía, hyung─ recordó el menor, agachó ligeramente su cabeza y miró a su compañero, advirtiéndole que no aceptaría una negativa.

─ De acuerdo, me convenciste─ rió nervioso. Tal vez necesitaba alejarse un poco de esas cuatro paredes y despejar su mente, además, quería recorrer Newark.

Surrender {SeBaek}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora