Baekhyun está enamorado de Sehun, y ha intentado que el maknae le corresponda durante tanto tiempo que está cansándose.
Sehun se niega rotundamente a enamorarse, pero cada vez se le hará más difícil controlar los sentimientos que su hyung despierta...
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Capítulo XXIX
Esa noche, había abandonado la recámara que compartía con su hyung poniendo a Junmyeon como excusa, diciéndole a Baek que el líder necesitaba hablar sobre un tema importante y tendría que dormir ahí. Aun cuando era mentira, su amigo no mostró intenciones en querer confesarle eso al vocalista.
Él yacía tumbado en su antigua cama, en posición fetal, su vista perdida en la pared... ¿Por qué no podía caer rendido tan fácil como Jun? Posiblemente, era pedirle demasiado a su cerebro, al menos en ese instante.
Su mente repasó el asunto durante todo el día, y supo de antemano que no descansaría a causa del mismo. Cerró sus párpados esperando así lograr contener las lágrimas.
Horas antes, se topó en la cuenta de Instagram de Baekhyun con una nueva foto, en la cual, para su desdicha, estaba acompañado por un famoso actor. Si la mayoría de sus actualizaciones aparecía con alguien del grupo, ¿por qué esa vez no? ¿Qué era diferente en Nam Joohyuk?
Claro que no le hallaba sentido a demostrar su desagrado por tal acto, cuando Baekkie ni él podían hacer públicas sus fotografías en pareja. No obstante, eso no disminuía el malestar que sentía.
Su hyung era muy talentoso, demasiado. Y él... Ocultó su rostro con su mano y sollozó quedamente. Por más que se esforzaba en sus clases de canto, sus líneas seguían siendo mínimas y, a pesar de ser un buen bailarín, a Jongin siempre le daban prioridad, dejándolo a él resagado.
Para bien o para mal, Baek siempre era rodeado por gente brillante, ¿y si algún día quedaba atrapado en el resplandor de uno de ellos? ¿Qué pasaría si Baekhyun decidía que su persona no era lo suficientemente buena? El simple hecho de pensar en la idea le desgarraba su alma.
No debía enamorarse del mayor, no podía permitírselo. Y no por el supuesto miedo que le había confesado a lo demás, ya que eso era únicamente una mentira.
¿Cómo podría alguien pensar que realmente quería lastimar a Baekkie? A él que había sido su amigo y ahora era su amante, a quien se convirtió en su adicción y en su adoración.
No, Sehun le temía algo más, algo que nadie sabía... ¿Alguno de los miembros sería capaz de entenderlo? ¿Alguien comprendería lo aterrador que era el entregarle su corazón a una persona y con ello darle la capacidad de destruir su alma con sólo una palabra, un gesto?
Los comentarios respecto a su carencia de talento le dejaban claro que había mejores hombres para su hyung. Y si Baek lo abandonaba por uno de ellos, él pasaría por lo mismo que Luhan y Tao.
Esa era la razón por la que siempre los tenía presentes, para recordar lo doloroso que resultaba enamorarse y, desde luego, las consecuencias que traía. Las lágrimas escaparon...
...
Se hallaba en la orilla de colchón, su cabeza yacía caída y su vista permanecía perdida en el espacio que separaba sus piernas. La sutil brisa que entraba a la habitación, hacía contacto con la epidermis de su desprotegido pecho, cerró sus párpados dejándose llevar por la caricia... Se sentía exhausto, agitado y caliente.