Eres más que el sirviente

Cap. 13 Los bolos

Walter entro al casino. Domingo, día de sólo 5 horas laborales, día para pasarla con los amigos...y con...Dice...ya no sabia que pensar de él; sabia que era un amor platónico...y por como seguirían las cosas, no debía tratar de conquistarle como quisiera...era un fastidio. Pero valía la pena si con ello conseguirá miles de años de paz. Con eso en mente, tomo aire y abrió las puertas del casino saludando a todos.

Carla- Hoy te vez muy feliz...debería preocuparme?

Walter- Fue una deliciosa noche.

Carla se asqueo un poco, la cara de Walter era de un total y completo pervertido.

Mientras tanto. Dice se arreglaba su traje de siempre; dejó a la mano un cambio de ropa en su cama.

(Hoy narra King Dice)

Hoy finalmente es Domingo, fue eterno esperarlo; pero no importa porque hoy me relajaría, esta vez iré con seres que si estimo.
Fui a desayunar muy animado. Me tope con toda la familia demonio...rara vez se me adelantaban. Así que les di los buenos días.

Devil- Si te levantas a la hora que se te antoja, entonces si es un buen día.

Lo mire extrañado, claro que no era tardé, era una hora normal para mi desayuno...baa, de seguro esta de mal humor. No le respondí y me metí a la cocina. No me había dado cuenta que me habían seguido hasta que fue muy tarde; unos brazos me atraparon en un abrasó.

Cuphead- Buenos días Dice.

Mugman- ¿Como amaneciste?

Dice- Buenos días, desperté con hambre.

Mugman- Eso creímos así que...

Cuphead- Te preparamos el desayuno.

Me mostraron un plato con un desayuno radiante y caliente, tenía huevo revuelto con un poco de pimienta, tocino envuelto en una salchicha ahumada y un bote de cartón con jugó de arándanos. Eminentemente se me escapaba la baba por la boca.

Dice- Wau, gracias, no se que desir...

Cuphead- No digas nada y disfruta.

Mugman- Aunque... Puedes decirme, Mugman no esperes más y hasme tuy

Dice- Buen intento (Lo interrumpí)

Tome el plato y el jugó, me hacer qué a cup y a mug para darles un beso en sus mejillas. Y salir de ahí para disfrutar de ese desayuno.
10 mint. Después estaba bajando las escaleras para abrir el casino, vi como ya todos se encontraban listos para trabajar, eso alegró todavía más mi día, asiéndome las cosas más sencillas.

Las horas pasaron tan normales como siempre...en los domingos; por alguna razón la gente era más estúpida que otros días y perdían sus almas casi al principio de cualquier juego. Por eso es que Devil nos da medio día libre, es cuando él más trabajo tiene y eso lo fastidia, pero es una tontería, si es cuando más almas consigue es para que sea una jornada completa, pero aya él.

Me concentre mejor en la mesa de juego, mira nada más otro perdedor.

Me estaba empezando a aburrir. Aun faltaba hora y media para cerrar y no hay ya más clientes. Me estire un poco, dispuesto a sentarme en los sillones del bar, donde desde luego, me vigilaban los hermanos tazas. Ya no se que pensar de estos chicos, tendré que hacerles entender que no existe forma alguna de no verlos como si fueran mis hijos.  Casi llegó hasta ellos pero de repente el casino se lleno...por lo que tuve que regresar a mi puesto.

Finalmente fue hora de cerrar, estaba un poco cansado, aparentemente todos lo estaban, estaba cerrando las puertas, cuando note que alguien venía hacia mi.