CAPITULO 7

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CELOS Y MENTIRAS


-déjame darte ideas de que ponerte – dijo Lou al otro lado de la línea en cuanto tome el teléfono.

-¿Cómo te atreves? Me has vendido -le dije con una fingida indignación

-¿vendido? Puedo jurar que estas que saltas en una pierna de la emoción. -me dijo, yo solo me reí ante su comentario, pero Lou no estaba muy equivocada, Collin me hacía sentir especial, pero entraba en conflicto de solo pensar en que tal vez era una chica más en su lista.

-se me hará tarde, yo me hago cargo de la ropa, ten un poco de fe en mí, Lou. -le dije para colgar la llamada

Salí de la ducha directo al armario de mi habitación, en cuanto lo abrí me arrepentí de no haber escuchado alguna de las sugerencias de Lou, pero no la llamaría para darle la razón, así que me aleje un poco del armario para verlo todo en perspectiva, vi como se asomaba la manga de una camisa a cuadros roja la tome, para luego tomar un vestido gris ceñido al cuerpo de tirantes el cual convine con unas vans negras y un bolso del mismo color de tirante largo, eran cerca de las 7 p.m mientras me concentraba en peinar adecuadamente mi cabello, cuando escuche la puerta, luego de lo cual baje precipitadamente las escaleras, en cuanto la abrí pude ver a Collin frente a mi vestido con una camisa blanca de manga larga y unos pantalones negros ajustado y un par de converse blancos, se veía muy guapo, me avergoncé al pensar que mi expresión de sorpresa era evidente, pero Collin parecía no notarlo pues también me examinaba con la mirada.

-estas preciosa

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-estas preciosa. -me dijo al cabo de un momento, Collin tomo mi mano para guiarme al auto que había traído con él, me abrió la puerta pude notar que en serio estaba haciendo un esfuerzo para que todo saliera bien.

Quince minutos más tarde estábamos aparcando frente a Mickey's, no le podía exigir algo mas a Collin, este restaurante era el mejor en todo Forks, y en Forks no había mucho, lo único que no lograba tolerar era a la camarera que disfrutaba comiéndose a Colin con la mirada, esta parecía no haberlo olvidado desde la última vez que estuvimos acá pues se apresuró a atender nuestra mesa en cuanto llegamos.

-Hola Collin, es bueno verte. -dijo esta en cuanto llego a la mesa, así que se conocían. -no vienes mucho últimamente. -le dijo de nuevo alzando una ceja.

-Hola Triana. -le respondió sin mirarla, pues tenia los ojos puestos sobre mí. -tengo mejores cosas que hacer últimamente. -dijo, pude notar que las palabras de Collin molestaban a Triana, me pregunté si había pasado algo entre los dos anteriormente.

-¿Qué se les ofrece? -pregunto Triana, la cual dejo de mirar a Collin para mirarme a mi con una falsa sonrisa sobre los labios.

Collin y yo comíamos mientras trataba de prestar la mayor atención a sus preguntas y a mantener una buena conversación con él, pero lo cierto era que no lograba concentrarme, cada que Triana se acercaba a la mesa me miraba con una estúpida sonrisa socarrona, sonrisa que seguía viendo mientras esta me miraba desde detrás de la barra del restaurante, aunque trate de ignorarla al máximo, me resultaba imposible.

-Ann, iré al baño, si quieres esperarme en el auto. -me dijo Collin luego de pagar la comida, yo solo asentí, lo vi retirarse, pero justo cuando yo estaba llegando a la puerta del restaurante pensé que lo mejor era retocar un poco mi maquillaje antes de irnos, razón por lo cual me di la vuelta para ir al baño, en cuanto llegue al pasillo donde se encontraban los baños pude ver a Collin con Triana colgada en su cuello mientras se besaban, suplicando por no ser vista me di la vuelta y Sali del restaurante, medite por un momento, pensé que lo mejor era irme de ese lugar en ese mismo instante, pero no podía ser tan infantil, a la larga Collin y yo no teníamos nada, yo ni siquiera tenía derecho a sentir celos o a hacerle un reclamo, razón por la cual camine hacia el auto, para esperarlo y fingir que no había visto absolutamente nada.

-¿hacia donde vamos? -le pregunte al notar que acabábamos de pasar la carretera que iba hacia mi casa.

-todos los chicos están reunidos en casa de Emily, pasemos un rato con ellos. -me dijo Collin con una sonrisa, yo sin ánimos de dar explicaciones, solo asentí y me dispuse a ver los arboles del bosque desdibujarse por la velocidad del auto.

En cuanto bajamos del auto vi a todos los chicos incluyendo a Lou, reunidos en el porche de la casa de Emily, nos acercamos para charlar un rato.

-debería irme. -le dije a Collin cuando este me invitaba a entrar en la casa de Emily, detrás de todos ya que iban a comer y ver la T.V, por mi parte yo estaba cansada de fingir que todo estaba bien.

-bueno, pero antes de llevarte a casa debo preguntarte. -me dijo Collin poniendo una sonrisa inocente. -¿crees que tengo una oportunidad contigo? -me pregunto con total inocencia, mi paciencia se fue por la borda, ¿en serio creía que podía verme la cara? La expresión de Collin se transformó al notar que yo lo miraba atónita -¿Qué sucede?

-Collin -le dije, parándome derecha frente a él. -te besas con la mesera del restaurante al que me llevas y preguntas si ¿tienes una oportunidad? -le dije elevando un poco el tono de mi voz, la expresión de Collin me hizo saber que no se esperaba que yo lo haya visto.

-yo... -dijo Collin empezando a temblar. -no la bese Anna en serio, ella se me abalanzo, pero el beso no duro nada. -dijo con una expresión de súplica.

-no te creo, Collin, lo siento. -le dije girándome para irme, note que todos estaban en la puerta escuchando nuestra discusión, mi andar se detuvo cuando los brazos de Collin me rodearon yo solo me gire para encararlo.

-Anna, todas las historias de la tribu Quileute. -me dijo Collin aparentando una seriedad poco propia de él. -son ciertas... yo soy un hombre lobo. -termino mientras me miraba detenidamente a los ojos, inevitablemente las comisuras de mis labios se elevaron en una sonrisa burlona, no sé qué pretendía, pero no le creía ni una palabra, estaba muy equivocado si creía que me jugaría una broma como esta.

-aja y ¿yo soy tu impronta? -le pregunte elevando la voz con un tono burlón, Collin me miro serio y asintió, yo solo negué ante su descaro y me gire para irme.

-Anna, el no te miente. -dijo Lou atravesándose en mi camino, la mire con rencor, no podía creer que mi supuesta amiga se uniera a la mentira, al teatro que había montado Collin, Lou noto que no le creía. -déjame llevarte a la casa, por favor. -me pidió, yo camine hacia su auto y subí en él, tampoco era que tuviera como regresar, vi a Collin mirándome desde el porche de la casa de Emily, este solo miro al suelo y se Safo agresivamente de la mano de Brady que acababa de tocarle el hombro, para luego correr en dirección al bosque en donde desapareció con todos los chicos detrás de él, Louisa me llevo hasta mi casa, en total silencio, no me apetecía escucharla, me sentía traicionada y ella lo sabía.

Destiny [Collin Littlesea] |Libro 2| De La Serie 'improntas'Donde viven las historias. Descúbrelo ahora