Por fin comienza la prueba entre ellas, es muy seguro que Peridot no seda tan fácil y que el alma Fría y terca de lapis insista de una forma sutil, su paciencia por Peridot se puede volver un punto a favor.
Peridot había salido mucho más temprano de su casa para no encontrar a lapis en la estación del camión, intento fallido, lapis había salido antes que zafiro y Ruby, para no llegar a la hora que Peridot se encontraba en aquel lugar para no incomodarla, todo había fallado, ahora ambas se habían encontrado cuando era lo que menos querían.
El silenció reinó y la incomodidad se hacia presente para ambas. Estaban a unos pasos de distancia, ni una tenia el interés de hablar ni de acomodarse en la banca tras de ellas, no había nada más que silencio.
El transporte hizo su aparición, dieron un paso hacia enfrente percatándose ambas de aquella acción y verse por primera vez a la cara.
-¿por qué no pasas primero? -pregunto lapis haciendo una mano hacia enfrente indicando el pase a la rubia.
-no, adelante, tu primero -dijo peridot imitando aquella acción de lapis.
-insisto -dijo lapis haciendo una leve sonrisa.
Peridot estaba a punto de contestar cuando se vio interrumpida por el chofer.
-bueno, si ninguna va a subir, me retiro -y efectivamente, el conductor avanzo dejando a estas chicas atrás, solo pudieron ver como se alejaba y con el sus esperanzas de llegar temprano.
Peridot al verlo alejarse, tomo su mochila, que extrañamente era de un azul celeste con toques blancos, corrió en dirección al instituto seguido de lapis.
—¡oye! ¡espera! —gritaba lapis desde atrás.
—¡eres muy lenta! —dijo Peridot tratando de retarla, haciendo una ligera mueca socarrona.
—¡eso crees! —dijo lapis apresurando su carrera y alcanzando a Peridot en tan poco tiempo, dirigiendo su mirada a Peridot y dedicarle una sonrisa triunfante. Ella era atleta así que esto era pan comido para ella.
Peridot la observaba asombrada, la había subestimado y ahora la estaba ridiculizando en su propia competencia. Corrían como si fuera un maratón, peridot aceleraba su velocidad en locaciones para, por lo menos, pasar a lapis por una mínima distancia.
Por fin se veía el instituto, peridot no quería perder, no de nuevo, así que con las pocas fuerzas que le quedaban corrió hasta pasar a la peliazul por unos centímetros y después, caer rendida en el pasto que se encontraba en el jardines de enfrente.
—te he ganado —dijo peridot triunfante, señalando a lapis con la poca fuerza que le quedaba, jadeaba del cansancio provocado por la carrera.
—te deje ganar — interrumpió lapis con una sonrisa socarrona —tu no podrías ganarme.
—que mal perdedora eres —reprocho la rubia —otro día lo comprobaremos —reto finalmente, acto seguido de una risa imparable.
—¿eso quiere decir que nos volveremos a ver? — lapis estaba sorprendida, "¿acaso pude acercarme a ella? ".
—he dicho que otro día —se levanto la rubia dirigiendo su mirada a su contraria —jamás dije cuando —continuó diciendo con una sonrisa leve.
—¡wow! —se escucho una voz a su lado, no tan lejos —es extraño verlas juntas a ustedes dos —dijo sorprendida amatista.
—entonces... Hasta otro día —se despidió la peliazul restándole importancia a la chica que acababa de llegar comenzando así su caminata al interior del colegio.
—no entiendo a esa chica —dijo la alvina mientras se acercaba a la rubia —en momentos es amable y alegre, luego cambia, es fría y apática —dio un leve suspiro.
—bueno... No es fácil de entender, pero no es lo que aparenta —dijo peridot imitando la acción de lapis —es mejor que entremos —dijo finalmente.
—¡ah! ¡claro! —la alvina imito a peridot caminando a un lado de ella en dirección a su aula.
•••
Lapis
Al alejarme de peridot, me encontré con jaspe, la chica que aquella vez se había metido a defenderme de sugilite pero se mejor que nadie que no se metió por mi, se metió por peridot y cada vez me queda mas claro.
—lapis, ¿podemos hablar? —se acerco jaspe para ponerse frente a mi.
—tengo clase —dije esto tratando de evitarla. Di un paso a un lado para esquivarla y poder pasar, pero esto de vio impedido por ella, colocándose de nuevo frente a mi en un solo movimiento —dejame pasar —hice una mueca de desagrado hacia ella.
—no hasta que hablemos —exigió tomándome de la muñeca.
—no tengo nada que hablar contigo —aleje mi mano en un jalón —ahora muevete —exigí tratando de hacerla a un lado pero no fue suficiente.
—solo será un momento —me veía de una forma calmada pero la verdad, no le tenia confianza a esa chica. La vi de una forma tajante ante sus palabras, logre esquivarla.
Comencé a caminar pero me detuve de inmediato y giré a verla.
—¿piensas quedarte ahí parada o eliges seguirme? —dije girandome de nuevo y seguir caminando seguida de unos pasos.
Genial, ahora no llegaré a mi primer clase.
•••
Llegamos a la parte trasera del colegio, ella se detuvo a unos cuantos pasos atrás de mi, sentía su mirada en mi espalda.
—y bien... ¿de qué querías hablar? —me giré para quedar de frente a ella, mi rostro solo expresaba molestia.
—es sobre Peridot —contestó poniendo una expresión demasiado seria.
—¿que con ella? —realmente no sabía que tenía que ver Peridot en esto.
—¿ella te gusta? —pregunto yendo directo al grano.
—¿que con esa pregunta? —Mr irrito esa pregunta. No es como si te importara lo que siento por alguien.
—si ese no es el caso, quisiera que te alejaras de ella para que yo pueda avanzar. —estaba determinada Con lo que decía, esto no estaba bien.
—¡¿pero que mierda estas diciendo?! —ya estaba molesta y ahora tenia que enfrentarla —¡si tu quieres intentar algo, házlo! ¡pero yo no me quitare del camino! ¡no es algo que tu decidas por mi! —mi semblante cambió a uno totalmente molesto.
—entonces, yo te quitaré del camino —se acerco hasta quedar frente a frente a mi —me ganaré el cariño de Peridot, me lo merezco más que tu.
—no creas que Vas a intimidarme —la observe directamente a los ojos.
Esto se ha convertido en guerra.
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He regresado!!
Aun no salgo de mi problema, pero emocionalmente me siento mejor.
Espero y les guste este nuevo capítulo.
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chica antisocial Pt 1
Fiksi Penggemarla historia de una chica solitaria que no tenia ni la menor idea de cuanto cambiaría al entrar a la universidad