Capítulo IV

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El príncipe Kai está muy tranquilo con respecto a la cita. Yo en cambio, me siento muy nerviosa porque nadie del palacio sabe sobre esto. ¡Espera! ¿Y si el rey se molesta por que su primogénito esta saliendo con una empleada? Bueno, aunque no soy empleada del palacio simplemente soy una espía dentro de él. Todo porque el conde Rosenbergquiere información de Heine. Si en este momento se da cuenta de lo que esta ocurriendo creo que me ganare otro golpe o un despido. La única información que conseguí es que antes de llegar al palacio es que el educaba a niños a cambio de comida y que siempre lo confunden como un niño.
-Ya llegamos... --dice Kai.
-Si
- ¿Te... pasa... algo?
-Estoy un poco nerviosa por la cita... es mi primera vez saliendo con un hombre.
-Uhm... el mío igual... pero... con... chicas.
-Bueno, ambos somos primerizos en algo. ¿Y porque vinimos al zoológico?
-La... ultima vez vine con mis hermanos... y Heine-sensei.
-Si no mal recuerdo que la primera vez que me hablaste me dijiste que te gustaban las cosas suaves. Supongo que los animales son suaves y parece que quieres tocarlos.
-Si. -se ruboriza- También quiero mejorar... mis habilidades...
- ¿Quieres hablar con normalidad?
Asiente con la cabeza.
Al final nuestra cita fue con el asunto de "Kai quiere comunicarse con las personas", él mostraba su sonrisa y las personas lo miraban con temor. Él se bajoneo, pero le estuve dando ánimos hasta que por fin podía comunicarse con las personas que atendían el parque. Nos reíamos mientras disfrutamos nuestra cita en el zoológico.
Todo estuvo muy lindo para ser verdad hasta que me encontré con Rosenbergmientras me iba a los servicios.
-Me saliste zorrita, ah. -me fulminaba con la mirada. -Tu trabajo no es enamorar al príncipe, sino averiguar la vida de Heine o al menos que estés enamorando al príncipe para que te de alguna información.
Alzo la mano para golpearme el rostro, pero en cambio cogió mi quijada y lo arrastro hacia él.
-Lo único que se de Heine es que antes de enseñar en el palacio, él educaba niños a cambio de comida. -Retorcida del apretón que me daba en la quijada.
-Uhm... Buen trabajo. Te mereces un premio. -Me besa con intensidad, incluso siento su lengua meterse en mi boca.
Noto que Kai esta mirando esta barbaridad y su rostro se torna frío.
Lo empuja al conde para que deje de besarme.
- ¡Kai! Yo...
- ¿¡Qué crees que estas haciendo con ella!?
El tono de su voz es tan gruesa cuando se enoja.
-Ella están linda que simplemente le quise robar su primer beso.
Kai se estaba enojando por que presionaba con fuerza sus puños.
-Kai... digo príncipe Kai no le haga caso.
-También quiero robarle sus otras primeras veces como en... el sexo. -El conde pone su cara coqueta para provocar a Kai.
Kai reacciona y lo golpea al conde.
-Noto que tu violencia no cambia nada como aquella vez en la escuela militar. -lo dice mientras sangraba.
¡Me harte!
-Lo siento. El zoológico ya va cerrar. -lo menciona un guardia del área. -- ¿Esta bien señor? ¿Quiere que le traiga un botiquín?
-No se preocupe estoy bien. Bueno, me retiro muchachos... y tú, prepárate para robarte tus otras primeras veces. ---Y se retira con elegancia del lugar.
Cuando volteo Kai ya no estaba. Lo busque por todas las áreas del zoológico, pero no lo encontré así que simplemente me regrese al palacio. Supongo que el príncipe estará en el palacio acariciando las patas de su perro para calmar la cólera u olvidar el incidente.

EL PRÍNCIPE DE OJOS CELESTESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora