Capítulo 10

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La pelirroja se encontraba caminando por los grandes pasillos del castillo, sabía que tenía que ir al comedor, y lo vería, vería a ese hombre que había llegado a ponerle el mundo de cabeza de nuevo. Y ese era el menor de sus problemas en esos momentos.

El mensaje que la reina había mandado a su habitación estaba claro, ella debería empezar a comportarse de manera madura, debía tener el comportamiento de una reina y dejar de comportarse como una niña caprichosa, al menos esas habían sido las palabras de Sarah, pero sabía que ella no era más que una chica de veinte años que tenía que sentarse en el trono a causa de que sus padres murieron y que este estaba en manos de alguien muy poco confiable, porque si a ella le hubieran preguntado si eso era lo que ella quería, posiblemente, hubiera lanzado todo por la borda.

Cerro los ojos antes de entrar al comedor, respiró profundo y se adentró en aquel lugar, todos estaban allí, se encontraban comiendo y riendo; Sarah estaba hablando con Cassy y con Lucas; Jack estaba besando la muñeca de Nicky quien le daba una pequeña sonrisa; Peter, Evan y Samuel se estaban riendo de Dios vaya a saber que; Xavier y Zac estaban hablando de algo, al parecer era algo serio, porque ambos tenían el seño fruncido y Zac estaba haciendo una mueca con sus labios.

─ Buenos días ─saludó ella mientras se sentaba del lado contrario de donde estaba la reina de Crissan.

─ Buenos días ─respondió la reina con una sonrisa burlona y siguió hablando con Cassy y Lucas.

La comida transcurrió en total silencio para la pelirroja, los demás hablaban animados, en cambio ella estaba concentrada en su comida, movía la comida de un lado a otro, era como si el apetito hubiera desaparecido. No se sentía del todo bien. Cuando miraba a su alrededor, observando la relación que todos compartían se sentía incómoda.

Como si ella no encajara en ese lugar.

El castaño se había dado cuenta de la actitud de Mónica y se preguntaba si ya habría mandado a los soldados con la noticia de que estaba buscando esposo, era una decisión que le arruinaría la vida a ambos, así que opto por intentar hacer cambiar de opinión a Mónica, empezaría de nuevo.

El primer paso era hacerse su amigo, otra vez.

─ Te vez radiante el día de hoy, Mónica─ dijo Zac para sacar a la pelirroja de su trance.

─ Lástima que no pueda decir lo mismo de ti ─respondió Mónica.

─ Siempre tan graciosa y amable ─ante esa frase todos vieron a la pareja, ¿Qué estaban haciendo? Xavier era el más desconcertado, una charla de veinte minutos a la basura ¿Es que acaso él hablaba con una pared o algo parecido?

─ Tan sarcástico e inútil como siempre ─se defendió Mónica.

─ Y eso es lo que te gusta de mí.

─ Evan ─gritó mientras se levantaba de su asiento─, quiero que mandes cartas a todos los hombres solteros del reino, también a cada príncipe disponible en los reinos vecinos, en esa carta debe decir que estoy buscando un esposo ─después de ello fijó su vista en Zac.

─ Evan, no ─contestó Zac antes de que alguien pudiera hablar─. No le hagas caso, solo esta diciendo tonterías, cuando está cansada dice esta clase de cosas.

─ ¿Tonterías? Mira quien habla ─exclamó furiosa Mónica─, Evan te he dicho que mandes las cartas.

─ Evan no es el secretario de nadie ─habló Nicky mientras miraba sorprendida a Mónica, pero sus palabras quedaron volando en el aire, pues nadie le hizo caso.

─ Por lo menos yo no quiero tener un matrimonio falso para ocultar mis sentimientos hacia otra persona ─escupió Zac mientras apretaba la mandíbula.

─ Te odio, Zacarías Abad.

─ El sentimiento es mutuo, Mónica Virtrow.

Luego de esa escena ambos salieron de la habitación y se fueron por pasillos distintos para alejarse el uno del otro, dejando atrás a un grupo de personas bastante confundidas.

─ Necesitamos un plan en este momento, si ellos dos siguen así se terminarán matando, solo con ver lo que Mónica quiere hacer con el matrimonio es suficiente para evidenciarlo ─habló Peter.

─ Tendremos que hacer una junta urgente hoy por la tarde ─apoyó Nicky

─ El plan puede esperar un poco, esto le está dando suficiente fuerza a Mónica para derrotar a Benjamín.

─ ¡Mamá! Por el amor de los dioses, mira lo que está pasando, Mónica está muy distraída y no creo que logre algo estando de ese modo.

─ Tú no lo entiendes, cariño, pero esto está saliendo de acuerdo al plan, mi plan.

─ Sarah, con todo respeto, esto va mal, una cosa es esto, lo otro es que Mónica va a hacer un plan para destruir a Benjamín y si se entera que él...

─ Jack, ella no tiene por qué enterarse y eso todos lo tienen claro ¿No? De hecho, Evan, tú que sabes qué es lo mejor para Mónica, sabes que esto es lo mejor ¿Verdad?

─ Sí, ella podrá con esto, es lo mejor ─murmuró Evan mientras miraba al resto, luego bajó la vista a su plato de comida─, pero no sería mala idea si empezamos con el plan esta tarde.

─ ¿Estás seguro, Evan? ─preguntó Samuel con evidente preocupación─ Por que, si tú lo dices, entonces...

─ Está seguro ─interrumpió la reina al chico.

─ Mientras más rápido tengamos un plan va a ser mejor, no me gusta verlos así ─susurró Xavier─. No podemos dejar que ellos arruinen sus vidas, ellos no merecen sufrir todo esto, iré a ver que estén bien ─el chico se levantó de la mesa y salió por la puerta, en busca de sus amigos.

La reina posó la vista en Xavier e hizo una pequeña mueca, una señal muy evidente de desagrado, nadie observó ese gesto, pues todos habían empezado a comer, solo Lucas fue quien lo notó, pero prefirió no hablar. Había algo que no encajaba en todo eso y él lo iba a descubrir.

Reino de Cristal |Completa ✅|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora