LIFE NOT EASY [SuperCorp - AU]

Prólogo

X

Esto fue hace años atrás, cuándo solo tenía 12 años de edad.

Estaba en la escuela, como todo día normal, con mis amigos.

A la hora del almuerzo, mientras estaba con mis amigos almorzando y conversando sobre que hacer la próxima vez que nos juntáramos en clases, unos tipos un año mayor que nosotros se nos acercaron junto a 2 chicas al lado de ellos, dos chicas que iban en mis clases.

— ¿Sucede algo?— dijo uno de mis amigos, Max, a el mayor que se llamaba Brad.

— Sí. — me miró. — Tú eres el problema. Eres el monstruo de la escuela.— me tomó de la polera haciendo que me levantara de mi asiento.

— No sé de que estás hablando.— dije con algo de temor.

— Hey...— otro de mis amigos fue tras de él para darle un golpe, pero de los compañeros que estaban a su lado tomó a mi amigo de los brazos y otro le dio un golpe en el rostro.

— ¿Alguien quiere desafiarme?— dijo Brad, que me tenía entre sus manos.

Nadie respondió, todos estaban asustados para poder hacer algo al respecto.

—Genial, porque todos tienen que ver el castigo que te has ganado.

— ¿Castigo? ¿De qué estás hablando?— decía sin entender a lo que quería llegar.

— Gay.—dijo entre dientes.

Él me tomó de los brazos mientras otros chicos me tomaban de las piernas.

— ¡Suéltenme!—gritaba esperando a que algún profesor, inspector o algún compañero me ayudara.

Me llevaron hasta donde se encontraba la escalera que llegaba al patio principal, de altura era casi de dos pisos, debido a que esa escuela se encontraba en un cerro, por su inclinación.

—¿Qué van a hacerme?— me estaba asustando.

Los veía a cada uno y a las chicas a su lado que sonreían victoriosas.

De ahí hicieron que tomara vuelo, movieron mi cuerpo para adelante hacía atrás para luego soltarme en el aire.

El recuerdo que tengo de eso era que empecé a rodar por las escaleras luego de que me soltaran. Casi 6 metros de caída por esos peldaños, sintiendo cada dolor en mi cuerpo y dolor en que nadie vino a ayudarme.

Llegué al final, sin poder moverme, sentía la sangre correr por mi cara. Me retorcia de dolor en el suelo.

Vi unos pies frente a mí. Alcé mi vista, era él de nuevo con sus puños cerrados, Brad se encontraba frente a mí furioso.

— No vuelvas a aparecer por acá, gay. No querrás que te pase algo más.

— No puedo creer que me hicieras esto solo por el hecho de ser gay.

— Porque eres una aberración. Das asco.— me decía con repudió y luego me dio una patada a mi estómago.

— Eres un asco para esta escuela. No puedo creer que tus padres pagaran para que estés aquí. No perteneces a nosotros. — dijo una de las chicas que acompañaba a mi agresor.

Si pudiera pedirle ayuda a mi hermano, pero era imposible. Él es mayor que yo y este año era su primer año en la secundaria mientras yo tenía que lidiar con este infierno.

Traté de levantarme del suelo, pero esa chica me dio un golpe en mis brazos logrando que todo mi cuerpo cayera al piso. Gemí de dolor. Mientras toda la escuela veía aquella escena.

— Son unos cobardes.— dije y limpié de mi boca la sangre que tenía.

— ¿Cobardes?— rieron y finalmente la chica me dio una patada al rostro logrando que perdiera el conocimiento.

Después de tal episodio que pasé en esa escuela, con solo 12 años de edad, después de ese gran golpe que recibí por solo ser gay, cosa que solo sabían mis dos mejores amigos de ese entonces, decidí hablar con mis padres, convencerlos para cambiarme de escuela, empezar de cero, siendo otra persona que ganaría respeto.

A ver si mi plan funcionaría.