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Hola. Mi nombre es Kara Danvers. Tengo 16 años.

Me mudé hace poco a National City, ya que mis padres, bueno padres adoptivos, obtuvieron una oferta de trabajo que no podían rechazar. Ellos dos eran doctores, cirujanos, y los llamaron para trabajar en el mejor hospital del Oeste del país.

Tengo una hermana adoptiva, hija de mis dos padres adoptivos, se llama Alex Danvers y está en su primer año de universidad estudiando medicina en la Universidad de Stanford.

Me sentía un poco fuera de lugar al ver que mi hermana y padres se fueron por el área de salud, mientras yo me iba más por los reportajes, las noticias.

Soy adoptada debido a que mis padres murieron en un accidente cuando yo tenía 13 años, no tenía algún familiar cercano que pudiera tener mi custodia.

Cuando los Danvers me adoptaron me preguntaron si quería mantener mi apellido, pero preferí cambiarlo al suyo. Quería empezar de cero, tener una nueva historia y que no recordaran a la pobre Kara que quedó huérfana. Y así tampoco tendría problemas en la escuela, así no descubrirían que soy adoptada y no pasar por una humillación.

National City era diferente a la antigua ciudad en que vivía antes, Midvale. En esta ciudad había más sol, cosa que me gustaba, se sentía más alegre.

En nuestra nueva casa en la ciudad tenía al fin mi habitación sola. Alex tenía la suya propia cuando venía de visita. En la casa anterior compartíamos la habitación, cosa que no nos fue muy bien, pasábamos peleando por tonteras, además siento que Alex nunca estuvo feliz con que sus padres me adoptaran, ya que siempre pasaba regañándome por cosas que supuestamente no debería hacer. 

Era mi primer día en la escuela de National City, National High School. El nombre no era muy original que digamos, pero era la mejor calificada en la ciudad y en el país.

Iba por el pasillo a secretaria para recibir mi horario y en que sala tendría cada ramo. Mientras caminaba con mi mochila en la espalda, mis lentes puesto y mi pelo tomado, sentía todas las miradas en mí. Por supuesto, ahí está la chica nueva.

Obtuve mi horario, la localización de mi casillero y su clave. Decidí ir donde se encontraba para guardar algunos libros y tener la mochila más ligera. Al llegar, intenté varias veces poner la clave del casillero, pero no abría, golpee con mis manos la puerta del locked algo furiosa.

  — ¿Necesitas ayuda?— me dijo un chico no tan alto, con una camisa a cuadros y con brackets.

— No puedo abrir este maldito casillero.— le dije algo avergonzada.

— Yo te ayudo.— extendió su mano para que le entregara el papel con la clave y que lo intentara él. Logró abrirlo.— Voilà.

— ¿Cómo? Lo intenté varias veces y tu vienes y logras abrirlo, así de sencillo.

— El truco está en que des un pequeño empujón hacía atrás y luego lo abres.

— Gracias, emmm...— aún no sabía su nombre.

— Winn Schott.— dijo dándome de la mano en gesto de saludo. —  Y tu eres...

— Kara Danvers.— respondí con una sonrisa dando ese apretón de mano.

— Bienvenida a National High School, Kara.— me guiñó el ojo.— Y ya que estamos aquí, ¿quieres que te acompañe a tu sala de clases?

— Sería de gran ayuda. Me toca Biología en la 312.

— Excelente. A mi me toca ahí también. Seremos compañeros.— dijo emocionado.

De ahí fuimos caminando a la sala de clases, él me contaba sobre su vida, mientras yo le contaba como fue que caí en esta escuela. 

LIFE NOT EASY [SuperCorp - AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora