Prólogo

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"La piedad es un privilegio para quien lo merece y sólo se dará una vez.  Muchos seres viles suplicando la piedad cuando la justicia viene hacia ellos.  Por eso seré justa; no me compadeceré por enemigos arrepentidos... "

Ese era el pensamiento de Danara ahora después de comprender que el error más grande que cometió fue apiadarse de enemigos.
Ella cree que el sentimentalismo te engaña y no te deja ver lo que es lógico y justo. Danara había madurado,  ya no era la Rosa frágil que arrancaban y despojaban sus pétalos; ahora tenía espinas y tenías que pensarlo dos veces para arrancarla y no salír herido.

Pero como toda flor y como la que consideraba Daven, ella conserva su lado hermoso, puro y radiante; aún tiene el sueño de ayudar a los indefensos,  a enseñarlos a defenderse como la vida le enseñó a ella, a protegerlos como su padre hace por ella. Pero lo único que necesita para ver su dicha cumplida es regresar y reclamar el respeto y reconocimiento que merece.

Con Loki es similar situación la que se presenta.

Loki ha llegado a más allá de los límites para reclamar el respeto, reconocimiento y valor que merece. El sólo quiere eso, que no sea reconocido como la sombra de Thor o el hermano menor sin importancia. Loki tiene un gran valor y potencial que demostrar por él mismo pero nadie lo comprende a excepción de Frigia, Sigyn y Danara.

También está haciendo todo por su hija, necesita que ambos sean reconocidos por lo que son; no quiere que la vean como un peligro y una asesina. Quiere que la vean como la princesa y joven fuerte que es.

Pero desgraciadamente llega el poder y la ambición a taparle la vista y hacer que pienses en ti nada más y que lastimes a otros sin darte cuenta.

¿Quien de ellos caerá bajo al reclamar su glorioso próposito? ...

Reclamar El Glorioso Propósito Donde viven las historias. Descúbrelo ahora