"Basta de tratar de ser lo que consideran "perfecto" por ello se aprovecharon de mi ingenuidad y confianza y me arrancaron el corazón, a mí Daven. Lo único que me queda es mi propósito y mí padre; aquel que nunca me va a traicionar... " Era lo que D...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El Bifrost los llevó a Asgard en donde Heimdall fue el primero en recibirlos con una sonrisa.
— Bienvenida, princesa Danara. — Dice haciendo un reverencia y Danara sonríe con cortesía.
— Muchas gracias, Guardián. Le echaba de menos. — Dice ella.
— Gracias, Heimdall. Puedes volver a tu deberes.— Le dijo Loki con una leve sonrisa y Heimdall hizo lo que dijo volviendo a observar los nueve mundos. — Ven Danara, vamos a casa para que descanses. — Le dice y Danara asiente y se retira.
Caminan por el puente y Danara observa todo con una sonrisa y mirada maravillada de ver de nuevo su hogar como si fuese la primera vez que lo ve. Loki se da cuenta de eso y sonríe, la mira y ve la realidad que ya no es su pequeña niña, ahora estaba creciendo y volviéndose una mujer hermosa, aunque después la volvió a ver cómo una niña, ella siempre siempre será su pequeña princesa.
— Momento... — Danara se detiene en seco al recordar algo. — ¿Quien dio el permiso para traerme? — Pregunta
— Yo especialmente. Ahora soy el rey. — Loki sonríe y Danara lo mira con sorpresa y alegría.
— P- pero Thor no era? — Pregunta y Loki niega.
— No, el hizo algo que cambió la opinión de Odín y está exiliado. — Explica. Danara iba a preguntar muchas cosas. — Luego te explico, lo importante es ahorita que estás aquí. —
Después de pasar el puente, varios habitantes recibieron a Danara con alegría, ya sea fingida o real esto hacía sentir bien a Danara, también los sirvientes la atendieron y dieron presentes.
Loki había decretado que si le faltaban el respeto a la princesa éste será castigado y funcionó. La alegría de unos era verdadera, mientras otros fingienda y con algo de miedo a acercarse pero lo hicieron bien.
— ¡Danara! — Exclamó Audra alegre al verla y le dió un abrazo. — Has crecido tanto. — Danara correspondió el abrazo con una sonrisa. — Te extrañé— Le dice separándose para verla, no era raro de Audra, ella siempre fue muy cariñosa y cálida.
— Yo también, más que mi nana eras muy especial para mí. — Danara sonríe. — Me alegra inmensamente el verte. —
— Oh me harás llorar embargo frente de medio Asgard y del rey. Mejor hablamos al rato cuando prepare tu habitación. — Audra ríe levemente y Danara sonríe. Estaba en su hogar de nuevo.
Loki sonrió ante la felicidad de su hija, extrañaba esa sonrisa que iluminaba su vida tal y como un sol sale en un día nublado. Danara entre la multitud sonrió al imaginarse a Daven recibiendola con una sonrisa para después ser felices pero desgraciadamente él no estaba y nunca podrán compartir felicidad.
— Danara. — La llama una voz femenina y familiar, Sigyn. Danara voltea a verla y sonríe y la va abrazar, Loki sólo mira a Sigyn mientras habla con algunos sirvientes.
