capítulos 17

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Narrador

Con cada paso que Vegeta daba caminando hacia ella hacía que los nervios de Bulma se incrementarán hasta el punto de no saber qué hacer y quedarse en shock, cuando estaba tan solo  unos pasos de ella logró reaccionar y caminar apresuradamente hacia la salida del antro perdiéndose entre la multitud.

Vegeta se apresuró en ir tras de ella no fue tan difícil encontrarla o identificarla ya que el pelo de ella no era muy común, cuando salió por la puerta del antro Vegueta la seguía de cerca sin que ella se diera cuenta que él la seguía.

Ella desesperada por creer que la iba a encontrar fue hacía el estacionamiento pero fue un grave error ya que no había nadie ahí adentro y estaba prácticamente oscuro, tenía pensado irse en el auto de su amiga pero recordó que no tenía ella la llave.

Pienso en lo estúpida que era porqué debió de quedarse en el antro ahí había mucha gente y no creía que él fuera tan estúpido como para intentar algo habiendo tantas personas presentes.

Camino hacia la salida del estacionamiento tenía pensado pedir un taxi he irse lo más rápido posible pero temía que él estuviera allí afuera, había personas allí también no creía que intentará nada al menos eso esperaba.

Camino apresuradamente para salir del estacionamiento tenebroso pero paró inmediatamente al sentir a alguien respirar en su cuello y un tonificado pecho tocar su espalda, unos brazos musculosos tomando con posesión su cintura, no necesitaba voltear para saber de quién se trataba.

Vegeta acercó su rostro al cuello de ella oliendo la exquisita fragancia que tanto extrañaba y sin poder evitarlo dejo unos besos en su cuello y con una mano tocó un seno de ella estrujandolo, ella dejó escapar un pequeño gemido se éxito tanto que era capaz de follarla contra la pared, pero la deseaba tanto que no quería interrupciones y no iba a permitir que nadie arruinara su encuentro entre su perra y el. Quería tenerla para él y hacer todas las cosas que añoro por esos malditos tres años quería marcarla como su propiedad.

La iba a ser suya quisiera ella o no la iba a follar hasta que ella lloré hasta que grité como la perra que era no iba a permitir que se fuera...no de nuevo.

La vio detenidamente y se dio cuenta de cómo iba vestida con asecsorios caros y de marca entonces sintió como la ira recorría su cuerpo al saber porque lo había abandonado, por otro.

Lo abandonó por otro hombre uno que le daba la libertad de ir donde quisiera y cuando quisiera uno que la consentía y le daba todos los lujos que ella merecía. Un hombre que no la obligaba a estar atada a él y que posiblemente ella amaba. El habría podido darle todo lo que merecía pero nunca la libertad tenía temor a perderla.

Sintió unos celos incontrolables al saber qué su perrita había estado esos malditos tres años en la cama de otro hombre disfrutando de lujos y comodidades mientras él  contrataba investigadores privados para encontrarla y pasaba noches soñando volver a tenerla en su cama.
Deseando que fuese ella y no su mano quien le diera placer, deseaba con desesperación poder volver a dormir abrazado a ella y que le diera la tranquilidad que necesitaba y que sólo ella podía darle.

Vegeta la tomo bruscamente del brazo llevándola hacia su auto, la maldita erección que tenia no lo dejaba caminar en paz.

Bulma: sueltame ayud...

Callo bruscamente cuando Vegeta le tapó la boca con la mano para no hacer un escándalo, no quería demorar quería meterse entré las piernas de su mujer lo mas rápido posible ella era el remedio para su erección y su maldita soledad que tanto odiaba.

Vegeta: cállate es mejor que hagamos esto por las buenas

Le dijo en un susurro intimidante que logró hacer temblar a Bulma pero trato de demostrar lo contrario.

Di Que Eres Mi Perra(Vegeta Y Bulma)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora