EL SECRETO DE LAS PRADERAS

El alma de Akanni

En ese momento kion y kovu abren lo ojos como platos y sin pensarlo dos veces siguen a dirección de Ono. Akanni estaba bien. El corazón de kion latía con demasiada fuerza, lo que le impulsaba, era saber que su compañero estaba bien. Que por fin estaba bien.

(BEHSTE)

– ¡Akanni... no debiste salir! –Anuncia impidiendo que se cayera –, aun no estas completamente recuperado.... Debes volver

Akanni estaba mareado. Su conciencia vagaba en algún lado, sin embargo... lo que tenía claro eran aquellas veces que habían resonado en su mente al despertar. Se sentía batido dentro de sí, sentía una gran necesidad por primera vez, de saber quiénes eran sus padres. Y si es que estaban muertos, como es que surgían esos sentimientos. ¿Por qué tenía esos recuerdos vagos? ¿Por qué sentía que algo faltaba en su corazón?

(KIARA)

– Akanni... –dice sorprendida al ver a Akanni de pie.

En ese momento Akanni se vuelve rápidamente a su dirección. La voz de Kiara, le resultaba dolorosamente familiar.

(AKANNI)

– ¿Dónde... esta kion? –se dirige a la leona con amabilidad. Su tono había cambiado por completo.

(KIARA)

– Hay que regresar adentro –ordena Kiara –, la lluvia seguramente no cesara hasta el amanecer.

En ese momento Akanni se suelta del agarre de Zuri. Dentro de sí, ya no podía esperar más.

(AKANNI)

– por favor... dime donde está. Necesito verlo...

Akanni se acerca a la leona. Era evidente que Akanni había cambiado repentinamente. Kiara lo mira inhóspita. Aquel león no era el que había conocido. Algo había cambiado.

(KIARA)

– te prometo que vendrá. Sin embargo... todos debemos entrar, no te encuentras bien aún. Te prometo que iré por kion...

(JASIRI)

– fuli... ¡no debes salir de aquí!... Kiara y los demás podrán manejarlo, no debes angustiarte.

(FULI)

– no es eso... es solo que... siento un gran dolor en mi pecho. Como si... algo se estuviese vaciando dentro de mí, y de repente... algo.... Extraño pudiese pasar.

En ese momento fuli se sentía totalmente afuera de sí misma. Era... como si algo nuevo se avecinara hacia ella.

(ONO)

– ¡los chicos ya debieron haberse encargado, Akanni seguramente debe estar dentro de la cueva nuevamente!

(KOVU)

– ¡kion...! solo respóndeme algo... –dice atareado –, ¿Por qué te interesa tanto saber de Akanni? –la pregunta sale con naturalidad y sin malicia. Era cierto... al igual que Akanni, kion empezaba a sentir quizá... aprecio el uno por el otro. De alguna manera, algo los concitaba –, ¿acaso... tú en verdad consideras la idea de que podría ser tu hermano?

Kion se queda sin palabras. La pregunta resulta mientras sigue aun a Ono, era cierto. ¿Acaso... Akanni, se estaba convirtiendo en alguien a quien proteger también?

(KION)

– Mi hermano... –susurra para sí mismo –, aun si el no fuese mi hermano... jamás lo dejaría morir.

Kovu lo mira de reojo. Kion mantenía la vista fija al frente, kion estaba siendo sincero. Sin embargo... no había contestado la pregunta directamente. En el fondo... kion, no podía aceptar la idea de que Akanni fuese kopa. En su corazón... se preguntaba, ¿si Akanni fuese el león que ha estado buscando desde hace tanto... acaso lo aceptaría?