Casi Angeles 5- VOLVER A DESCUBRIRSE

CAPITULO 36

Narra Nacho:

Estábamos caminando rápido en todos los pasillos pero no había salida. Todos los pisos se parecían. Escuchamos unos pasos que venían hacia nosotros, así que abrimos cualquier puerta y entramos. Era una habitación oscura y vacía. Excepto al fondo, donde podíamos distinguir una luces.

-¡No sirve esconderse! ¡Sabemos que están aquí! Gritó un hombre que abría y cerraba cada puerta. Se acercaba más a la muestra....

-Rápido, a esconderse. Tomo la iniciativa Teo.

Nos acercamos todos a esta luz y nos dimos cuenta que era una máquina. Teo abrió la puerta y entró seguido de Melody que cargaba Amado. Traté de entrar yo también, pero Teo me rechazó.

-¡Que haces man!¡Yo también quiero entrar!

-¡No entramos todos Nacho!

-¡bueno entonces tú sales y yo entró pero no me quedó afuera!

-Perdon Nacho... Y cerró la puerta.

Ahí fue cuando escuché un ruido que me dejó sordo. Me volteé y vi un inmenso rayo de luz.

-¡Teo! ¡Como vas a... Teo le tapó la boca con su mano para que no haga ningún ruido.

-Shhh... No hables...

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Los guardias llegaron con Jazmín y Tacho que apenas lograba mantenerse de pie.

-Arrodillenlos. Ordenó Bárbara señalando a Mar, Tacho y Jazmín. -Uno de ustedes tres, morirá. Y tú, Esta vez señaló a Thiago. -Serás el que elegirá.

-¡Yo no voy a matar a nadie!

-Nunca dije que debías matar a alguien. Pero debes elegir ¿O prefieres que los mate a los tres?

-¿Porque nos hace esto? Preguntó Mar llorando. ¿Que le hicimos?

Bárbara la miró seriamente y no le respondió.

-Está bien... Tuviste la oportunidad de elegir quien hiba a morir pero no la aprovechaste. Ahora, te la hago aún más difícil. Tú,¿Como te llamas? Le preguntó Bárbara a Tacho levantándolo por el cuello.

-Ju... ¿Juán? ¿Tacho? no se...

-A ver Juán...Te falta poco. Menos de una hora, así que tu amiguito tendrá que elegir esta vez entre su novia o la tuya.

-No es mi novia. Habló Tacho con dificultad.

-En fín, era para avisarte que aproveches de la última hora que te queda.

Bárbara lo soltó y él se cayó directamente golpeándose la cabeza contra el suelo.

-¡No! ¡Por favor sálvenlo! ¡Hagan algo! Se desesperó Jazmín.

Narra Tacho:

Veía todo borroso. Ya no sentía los miembros de mi cuerpo. Estaba acostado en el piso viendo los demás llorar. Pero no me arrepiento de nada. Todo esto, de una manera o de otra, se tenía que terminar...

-¡Thiago! ¡Hace algo!

-Thiago no puede hacer nada. Se burló Bárbara. -¿Y Thiago? ¿Quien muere y quien vive? Por el momento...

-Nadie. Yo no voy a elegir quien se irá de aquí. Si quieres matar a alguien hazlo pero a mi no me forzes a elegir.

-Veo que me estas desafiando.... Esta bien, esta bien. Tú lo quisiste.

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-¡Como lo vas a dejar afuera Teo!

-¿Que querrías? ¿Que Nahco estuviese aquí en tu lugar? Mira Melody, era más estratégico que yo me salve en vez de Nacho. ¿O piensas que Nacho sería capaz de protegeros?

-No te pensaba tan cruel Teo.

-Soy realista, no cruel.

La máquina comenzó a vibrar y ambos desparecieron.

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Narra Jazmín:

Escuché dos disapros. Una de blas balas se precipitaba lentamente hacia mi. Pude escuchar un grito. Era el deThiago. No tardé en sentir la bala que me atravesó la cien. Mis piernas que apenas soportaban el peso de mi cuerpo, terminaron por dejarme caer al lado de Tacho. Logré voltearme con la poca fuerza que me quedaba. Los últimos ojos que vi fueron sus ojos. El seguía respirando pero me miraba sin reaccionar. Poco a poco, mi respiración acceleró. Podía sentir estos temblores que, me hacian ver algunas imágenes de mi vida...No querría morir ahora. Todavía no era el momento. Pero era el destino...