EL AMOR DE MI VIDA ||WARIAM||

¿Un karaoke?

Las navidades se acercaban, la mayoría de mis amigos se irían a sus ciudades de origen mientras que otros nos quedaríamos aquí a pasar las fiestas. Es por eso que decidimos hacer una mini despedida yendo a un karaoke.

¿Y por qué a un karaoke? Bueno eso se lo tendríais que preguntar más bien a Mimi y Ricky que eran los que tuvieron la idea, para no variar.

- ¡VAMOS MIRIAM! – gritó Raoul.

- Ya voy, ya voy – contesté saliendo del baño a toda prisa.

- Vamos tarde – comentó el rubio lanzándome las llaves del coche para que las metiera en el bolso.

- Bueno, si alguien que yo sé me y su novio no me quitaran la ropa del armario tardaría menos tiempo en encontrar lo que quiero ponerme.

- Es que menudo estilazo tiene aquí la amiga- dijo Raoul cogiéndome de la mano y dándome una vuelta para mirarme por detrás- ya verás cuando te vea tu novia, Mimi la va a tener que poner un baberito.

- Que no es mi novia – resoplé abriendo la puerta de la calle.

- El fuelle amiga, el fuelle.

Fuimos los últimos en llegar al local, antes de entrar me ajusté bien el top negro de encaje y miré que el traje rosa que llevaba encima no se me hubiera arrugado en el coche.

- Venga, que estás cañón Miri – me apremió Raoul para que me metiese dentro.

En el interior nos llevaron a una sala que sería la que habrían alquilado mis amigos solo para nosotros. Tenía reconocer que para no ser muy fan de los karaokes el sitio tenía un rollo que me gustaba. Al entrar todos se levantaron a recibirnos, entre besos y abrazos vi a Ana al lado de Ricky, recorriéndome con la mirada y me felicité internamente por haber elegido ese outfit. Cuando Ana se acercó, me tocó a mí hacerle el chequeo correspondiente y casi se me cae la mandíbula al suelo cuando vi que se había puesto vestido, en estos dos meses nunca se había puesto uno y qué gran decisión.

- A ver si vas a ser tú quien necesite un baberito amiga – me dijo divertido Raoul al oído antes de besar a su novio.

- Estás guapísima - saludé a Ana cuando llegó hasta mi.

- Tu tampoco estás mal- saludó de vuelta la Canaria.

Las dos nos sonreímos cómplices y fuimos a sentarnos con nuestros amigos. Ana era mucho más cariñosa que yo y sabía que le gustaría poder mostrarlo en público conmigo. Pero yo siempre había sido más reservada, no es que no tuviera muestras de cariño con la Canaria pero por ejemplo en el tema besos, prefería que no nos diéramos ninguno delante de nuestros amigos. Al fin y al cabo no éramos pareja.

- Vamos Miri – dijo intentando besarme.

- Ana... - me separé y puse distancia entra nosotras.

- ¿Pero por qué? – preguntó algo molesta intentando besarme otra vez.

- Ya sabes que prefiero que no – contesté dándole un beso en la mejilla.

- Pues vale, tú te lo pierdes – repuso poniéndose de pie y subiendo al escenario- ¿Quién canta algo conmigo?

Mimi se levantó de un salto y corrió al escenario, rodé los ojos divertida al ver que Ana me echaba una mirada que decía "Eso te pasa por tonta". Y la verdad es que quizás me estaba comportando como una idiota.

Nerea fue la encargada de elegir la canción que cantarían las dos amigas, las notas de "Don't you worry about a thing" comenzaron a sonar y los que estábamos de espectadores nos vinimos arriba. Las chicas lo hacían muy bien, sabía que Mimi era una estupenda bailarina y Ana audicionaba para musicales, así que nos regalaron un buen espectáculo que terminó en un fuerte abrazo.