Insomnio [KaiSoo]

40. Fotografías

Jongin toma un sorbo de su latte y después le sonríe a la pantalla de su celular.

— Haré que revelen cada una de las fotos de nuestro cumpleaños. Me encantan demasiado. —dice revisando la variedad de imágenes que Junmyeon le ha enviado por correo electrónico.

— Déjame verlas. —pide Kyungsoo sentándose a su lado en el sillón booth de aquella cafetería, por lo que el menor le presta el móvil.

Al deslizar su pulgar por la pantalla, el blanquito se observa a sí mismo sonriendo a la cámara, haciendo gestos como corazones junto a Jongdae, bocas de pato con Baekhyun y siendo burlado por ser más pequeño que Chanyeol y Sehun. Además hay otras tomas en dónde se ve abrazado a Junmyeon, bailando con Yixing y, por supuesto, posando junto al otro cumpleañero.

La secuencia de fotos de la pareja empieza desde una muy normal en la que se encuentran uno al lado del otro, luego otras en las que se ven más cómodos. Fotografías dónde se abrazan mientras hacen varios gestos a la cámara. Sin embargo, hay otras capturas que Junmyeon ha tomado cuando ya no se encontraban posando.

El rubio fotografió cada instante después de que el moreno haya empezado una guerra con la crema batida que cubría los pasteles.

Cada imagen es hermosa, incluso las que están más borrosas o desenfocadas, pues cada una capta un momento único.

Kyungsoo se detiene en las imágenes  que muestran los momentos en los que Jongin se queda mirando fijamente su rostro embarrado por el merengue.

— ¿Cuál es tu favorita? —Jongin pregunta cuando el mayor desliza su dedo hacia la última imagen.

Un instante segundos después en el que el moreno no soportó lo tierno que se veía y besó sus labios.

La toma es tan preciosa que Kyungsoo quiere chillar.

— No podría decidir. —es todo lo que dice, lo que hace a Jongin sonreír.

— A mí personalmente me encanta esta de aquí. —dice tomando su móvil de vuelta para buscar la instantánea de la que habla.

— Chanyeol captó completamente lo adorable que eres. —continúa.

— No estaba siendo adorable, sólo quería verme divertido. —le corrige— No soy adorable. Para nada.

— Claro, cariño. No eres adorable. —responde el menor— Y yo soy Superman.