🔺️20

83 11 0
                                    

Observaba un extraño programa de comedia mientras disfrutaba de comida china. La bola de pelos pretendía ser amable y a cambio de eso esperaba recibir una parte.

Mi celular comenzó a sonar a mi lado, seguí viendo el programa. Segundos después el teléfono del departamento hizo lo mismo, lo ignoré. Insistieron por varios minutos hasta que ya no escuché nada.

Veinte minutos después él entró apresurado por la puerta, la bola de pelos lo recibió como siempre pero caminó con pasos enojaos haciendo que se espantara.

—¿Volviste temprano por qué no confías en mi? —Llevé comida a mi boca.

—¿Podrías contestar en teléfono? —estaba enojado.

—No —comí un poco más.

—¿Es tan difícil para ti responder?

—Si las llamadas son para comprobar si estoy haciendo una estupidez, claro —solté con su mismo tono de voz.

Suspiró y se acercó.

—Me preocupo por ti, no lo mal interpretes —intentó besarme, pero llevé más comida a mi boca.

Soltó una pequeña risa y despeinó mi cabello con la mano para salir nuevamente del departamento con su elegante traje azul.


-Kyan

¡No es lo mío!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora