¿Estaba molesto?
—¿Cómo debería llamarle a tu comportamiento? —daba golpes en el volante.
El olor a plástico del auto nuevo era espantoso si lo comparaba con el exterior.
—Llámalo como todos: locura —me atreví a mirarlo.
—¿Locura?, tú no estás loca —pusó su mirada sobre mi.
—¿Cómo lo sabes? —levanté una ceja.
—Porque de estar loca, no estarías conmigo.
Ja, idiota.
Tan cliché.
-Kyan
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¡No es lo mío!
Nouvelles-¿Qué es lo tuyo? Se lo preguntó durante mucho tiempo y ella siguió sin averiguarlo. ¿Lo piensas? •Capítulos cortos•