Fifi
Nos fuimos y realmente estaba destrozada, Charlie me engaño y yo estaba muy ilusionada con la idea de que ambos estaríamos juntos por el resto de nuestra vida. Lloraba lágrimas y uno de los guardias me consolaba.
Por un momento pensé que realmente Thomson había cambiado, pero, al momento de llagar a aquella casa lo esperaba la misma tipa que estaba con Charlie. Thomson le dio dinero y la tipa solo se rio y dijo que Charlie fue una presa difícil, que le hubiera encantado saborearlo. Escuche eso y descubre que malentendí todo. Trate de escapar pero los hombres me bloquearon y luego me metieron a la fuerza a la casa. Confiar en Thomson fue el peor error que pude haber cometido.Charlie
-Oye chico- escuchaba una voz -¿Estas bien?-
Yo me levante y tome de los al oficial que me hablaba. Le empecé a gritar totalmente angustiado todo lo que me había pasado y él trato de ayudarme y calmarme. Cuando lo logro empecé a razonar y sabía que no podía hacer mucho si fue ella quien se fue.
El oficial me llevo a casa y fui a recostarme al sillón. Empecé a llorar y lamentarme, Fifi se había vuelto todo para mí y sin darme cuenta la perdí, pero sé que no fue mi culpa, alguien me la robo y yo realmente no tenía intenciones de perderla ni de que la lastimaran más.
Volví a la comisaria y dije que la secuestraron aunque si descubrían que mentía me arrestarían, pero valdría la pena si con eso puedo explicar las cosas. Cuando me pidieron describir al tipo, resulto que mi descripción fue idéntica a la de un criminal buscado por trata de blancas, eso solo significaba que Fifi realmente corría peligro. Los policías me dijeron que lo llevan buscando por un tiempo pero que no dan con su paradero y que nadie ha querido aportar con información, sin embargo estaban dispuestos a ayudarme.
Llegue a casa de nuevo y no me había dado cuenta que los minis estaban en el suelo, lo que significaba que ella estuvo jugando antes de irse. Los tome y los abrase tan fuerte como pude y volví a llorar, y sin darme cuenta me dormí en la sala.
Al día siguiente le pedí ayuda a todos. Jeff y Carol empezaron a buscar información. James me ofreció su ayuda como abogado y movilizo a algunos conocidos. Luego los nekos. No sé ni cómo les logre explicar la situación pero también me ayudaron, al parecer los minis que hiso Fifi me ayudaron mucho.
Solo pasaron dos días y ya tenía a una legión ayudándome, pero aún me faltan algunas personas. Fui con los chicos del callejón y estaba dispuesto a pedir su ayuda. Cuando llegue ellos estaba guardando cosas, como si se fueran a mudar. Como siempre me saludaron y me dijeron que no tenían mucho tiempo, que se iban a tener que ir por un problema que tuvieron, pero que pronto regresarían.
Nos sentamos en su pequeña sala y me explicaron su situación, la cual estaba relacionada con el mismo hombre que busco. Luego les conté mi situación, desde que llego aquella extraña y me tumbo al suelo y el momento en el que Fifi vio todo y lo mal interpreto. Estaba mal y los chicos lo notaron, y trataron de darme ánimos, pero fue Fabián, uno de ellos, que me dio una motivación.
-Creo que te puedo dar una mano antes de irnos- me dijo con determinación -Yo tengo una amiga en ese lugar y la quiero mucho, la visitaba casi todos los días y le prometí que la sacaría de ese lugar donde ella está sufriendo, solo pensar en lo que esos hombres hacen me llena de rabia-
-¿Qué?- dije con temor -¿Qué clase de lugar es ese?
-Es un maldito club, pero la policía no sabe de eso, los tipos lo tienen bien protegido y nadie puede decirle, y menos yo, ya tengo demasiados problemas con la ley- luego cambio un poco de apariencia -y es por mi culpa que nos vamos, la trate de salvar y me pillaron, y a hora me quieren matar a mí-
-Pero sabes donde esta ese lugar ¿Verdad?- dije ilusionado
-Claro
-Llévame.
-Pero...
-Sin peros, yo quiero ver a Fifi de nuevo, y no me importa morir si logro darle su libertad otra vez- dije firmemente -¿Entonces, me acompañan?
Dije eso y ellos se vieron mutuamente, luego se dirigieron a sus maletas y empezaron a sacar varias cosas, sus prendas callejeras: capuchas, cubre bocas y demás cosas de camuflaje, y también unas armas, dos pistolas, cuchillos y bates. Ahorita que los veo bien debería tener miedo de ellos, pero la verdad es que me caen bien, y ya no se ven tan peligrosos. Luego me dieron una pistola eléctrica.
-Sabemos que no te gustan las armas, pero si quieres sobrevivir tendrás que llevarte esta por lo menos-
En estos momentos no estaba en condiciones de negarme ya que era Fifi la que corría peligro.
Nos alistamos y yo tenía un plan por si todo fallaba, y esperaba no usarlo. Salimos y tardamos unos minutos en llegar, vimos la entrada y realmente parecía una casa detrás de otra, ahora sabia por que la policía no daba tan fácil con ellos.
Repasamos el plan y estábamos listos para atacar y antes de empezar Fabián me detuvo.
-Oye, si esto sale bien, tal vez la banda pueda quedarse y podríamos invitarte a salir.
-¿Y si sale mal?
-Eso no pasara, porque estamos hablando de salvar a dos personas importantes, no de vengarnos. Que ellas sean nuestra motivación.
Luego nos acercamos y nos alistamos para empezar.
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Mi neko maid
Lãng mạnCharlie es un chico que vivía solo hasta que conoció a Fifi, una chica con la cualidad de transformarse en neko cuando quiera. Ella para pagarle el favor a Charlie de haberla salvado, se convierte en su sirvienta. Con el tiempo aprenden a vivir junt...