Capitulo 22: " Save my soul, baby"

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Michael.

  Iba quizás a 100 millas por hora por toda la carretera principal y no me importaba. Ignoraba todas las personas molestas que dejaba atrás y también las que se encontraban frente a mi. Era muy dificultoso manejar aun mas por las lagrimas que hacían mi camino borroso. Literalmente, no sabia como no había tenido un accidente o matado a alguien. Esta manera de manejar no era de Dios, pero tenia que llegar al lugar que Harry "maldito mocoso" me había indicado. Esto era como una pesadilla viviente, era como si viviera en una película de terror en mi vida diaria. Jamas creí que podría vivir una vida así, y si se lo están preguntando Harry nos odia porque metimos tres de sus hermanos a la cárcel y uno murió en el proceso. El nos culpa por eso, especialmente a mi. Si también se pregunta si tengo miedo, puedo decir que estoy aterrado. Una de las personas que mas amo estaba secuestrada y la otra... bueno, la otra ya saben. La deje sola en una calle a su suerte. Ojala y sea buena suerte. No logre llegar al lugar que me habían indicado cuando el sonido de mi teléfono me saco de mis pensamientos.

  " Seria una lastima que también perdieras al amor de tu vida"- Junto con una foto de Helena amordazada. El mensaje era de Harry. Maldito hijo de la gran puta, lo voy a matar. No había pasado mucho cuando estaba dándole golpes al volante de mi auto y esto obviamente hizo que perdiera el control del auto y se estrellara suave pero firmemente contra un árbol.

-Genial.- Dije obviamente sarcástico y baje del este golpeando con todas mis fuerzas las llantas en unas cuantas patadas.- Maldición, Porque? Porque?- Sin pensarlo golpeaba mi cabeza con mis manos una y otra ves. Estaba rojo de coraje y de lagrimas bajando por mi rostro. Apreté el teléfono fuerte en mis manos, tanto así que estille la pantalla. No conforme con eso, lo tire contra el suelo un par de veces seguida y sintiéndome derrotado me tire al suelo a llorar como un niño de seis años.

-Ey, Jackson!- Escuche como me llamaron y mire hacia el frente. Cuatro camionetas negras estaba de frente y Harry salio de una de ellas. Maldito perro asqueroso. Me pare al instante y el saco su arma de su cinturilla, me quede quieto.-Ay, Jackson, Jackson jamas vas a cambiar.- Dijo riendo y rascando su cabeza con el arma. Como desearía que se le safara un tiro.- Ven conmigo, yo mismo te llevare donde deberías estar hacen horas.- Dijo y se viro hacia la camioneta pero paro al instante que le hable.

-No iré contigo, Harry.- Dije firmemente mirándolo con ganas de matarlo y la ves con un nudo en mi garganta. Odiaba con todas mis fuerzas la impotencia.

-Se que eres lo suficientemente estúpido como para dejar a tu amada sola en una carretera, lo suficientemente inútil como para no llegar por tus propios medios a donde tu hermana y lo suficientemente débil como para encontrarte aquí llorando como un mocoso. Porque no serias lo suficientemente imbécil para subir a mi camioneta e intentar salvar la vida de tus dos personas favoritas?- Pregunto haciendo que mi paciencia se acabara.

-Eres un maldito hijo de puta, Harry.

-Lo que quieras, sube.- Volvió a reír y yo no tuve mas alternativa que subir. Era eso o no ver a mi hermana y a Helena nunca mas de nuevo.

POV.

  Al instante que Michael se subió a una camioneta diferente a la de Harry vio a Helena allí sentada, sana y salva.

-Gracias, Dios.- El chico no dudo en mostrar la alegría que recorría por sus venas.- Todo estará bien, hermosa.- No dudo en susurrarle y tocar su mejilla con dos de sus dedos.

-Si.- Helena hablo en un hilo de voz y al instante se hundió en el cuello de Michael a llorar.- No puedo mas, Michael. Quiero que todo esta acabe. Todo...- Lo miro a sus ojos aguados.- Esta guerra entre tu y yo, la guerra entre todos. Por favor...- Lo ultimo lo dijo en un hilo de voz quebrado por el llanto y apretó fuerte el cuello del chico.

-Te prometo que aclararemos todo... mi amor.- Dijo el por primera ves en todos estos meses sinceramente y con el mismo brillo de amor en sus ojos por ella.- Prometo escucharte y explicarte lo que desees.- Habiendo tenido la muerte tan cerca severa veces y habiendo estado en peligro tantísimas veces el sentía la necesidad de aclarar todo, porque uno nunca sabe cuando es el día final.

-N-no s...- Ella no podía hablar bien así que se hundió aun mas en el cuello del moreno y el acaricio su cabeza con firmeza y ternura.

-Te protegeré, lo juro por Dios. No te fallare una ves mas.- Prometió el ultimo y la beso en la cabeza.

  Pararon en un lugar desconocido y los bajaron a rastras de las camionetas para después dejarlos allí tirados, solos.

 Michael.

  Se largaron a la mierda y yo no podía estar mas confundido. Donde esta mi hermana y que demonios esta pasando aquí? Todo estaba absolutamente vació y mire a Helena totalmente sacado de mis casillas.

-Estamos solos.- Dije en forma irónica e incrédulo y ella me miro de la misma manera.- Que clase de juego es este?- Volví a decir en voz alta dándome la vuelta buscando alguna respuesta y lo único que encontre fue un papel blanco en el suelo.

"Tu estupidez sobrepasa limites, Jackson. Ahora si comprobé lo que ya creía, eres mas ingenuo de lo que pensé. Te tengo en mis manos cando quiera"

  Fue una trampa. Y este maldito perro tenia toda la razón. No puedo creer que haya caído en su maldita trampa. Ni siquiera se me ocurrió llamar a mi hermana a ver si estaba bien. Tonto, Jackson, definitivamente estas inútil. No puedo parar de recriminarme a mi mismo. Como agente yo mismo estaba decepcionado de mi y de mi ingenuidad. El dolor por mi hermana me cegó por completo y actué sin pensar, sabiendo que eso no se puede hacer. El maldito me tuvo tan cerca que me pudo matar a mi o a Helena, todo por mi ineptitud. No lo puedo creer, me siento defraudado.

  Como si Helena leyera mis pensamientos me abrazo, para calmar mi furia hacia mi mismo y en ese abrazo sentí como me salvaba de los millones de abismos a los cual estaba apunto de caer. Sentí como me salvaba a mi, como salvaba mi vida y recuperaba algo de paz con ese abrazo. Sentí la tranquilidad de ser yo plenamente con alguien que me amaba incontablemente.

... Y esa era ella, la única que me podía salvar. El amor de vida.

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