¡Por fin se han terminado las clases! Ya era hora, señor jajaja.
¡Ahora podré subir capítulos más a menudo!
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Narra Lauren
Habían pasado varios días, desde que llamé a Machine. La policía había venido tres veces a tomarnos declaración. Todo de momento, parecía bastante normal. Aunque mis padres, y también Sinu y Alejandro siguen sin querer que policías estén por la finca todo el día vigilando.
Ahora estaba retocando la madera de la casa del árbol.
-Jauregui! -miré a Dinah que venía hacia mi. -Quieres almorzar con nosotras? -dijo mientras yo me bajaba de la escalera.-
-Si, claro! La verdad me muero de hambre!
-Hoy viene Eugenio a visitar a Mila!
-Genial, no? -intenté sonreír pero solo me salió una mueca.-
-No sé... Dímelo tú. -rio.-
-Dinah. -me detuve mientras tocaba su hombro. -A la que le tiene que parecer genial que venga Eugenio, es a Camila. No a mi.-
-Jauregui! Relájate! -pasó una mano por mi hombro mientras caminábamos para la casa. -Todo te lo tomas muy seriamente. Tienes que vivir más la vida. Hace cuánto que no follas?-
-Eso no es de tu incumbencia, Dinah. -rio.-
-Eso significa que ya hasta tienes hasta telas de arañas ahí abajo! -volvió a reír. -Estás igual que Mila entonces!
-Di, de verdad. No quiero hablar de eso.
-Vaaale! Pero en serio Lau... Tienes que vivir más, y relajarte. Y sobre todo, follar más. -negué sonriendo.-
.........
Después de almorzar, Dinah y Mani habían ido al pueblo. Camila se quedo en la sala, viendo una película conmigo.
Mientras la película transcurría hablábamos de todo un poco.
-Buenas tardes, bellas damas! -me giré, y era Eugenio.-
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-Eu! -dijo Camila mientras corría hacia el, para abrazarle.-
Agaché la mirada, cuando sus labios entraron en contacto.
-Lauren! -Eugenio vino hasta a mi. -Me alegro de verte! Cómo estás? -sonrió viéndome.-
-Todo bien Eugenio. Es bueno tenerte de regreso! Aquí todos te han extrañado.
-Solo vine por este fin de semana. Después tendré que volver... Pero así es el trabajo.
-Me imagino. Yo los dejo solos. Permiso!
-Hasta luego Lauren! -dijo Eugenio, para luego besar a Camila de nuevo.-
Salí de la sala para irme a la casa del árbol. Voy a pintar las últimas maderas que me faltaban.
..........
Cuando me quise dar cuenta, ya era de noche. Había estado bastante distraída. Mañana colocaría la madera. He hecho un gran progreso.
De pronto, llegó un coche negro.
Me acerqué, y...
-Machine! -dije sorprendida.-
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-Jauregui! -dijo sonriendo.-
Nos acercamos, y nos estrechamos en un fuerte abrazo.
-Dios! Como te he echado de menos... -sonreí mientras lo miraba. -Qué haces aquí, cabrón? -el rio.-
-Bueno... Digamos que me apetecía dar un paseo por México. Y me he dicho, vamos a ver a Jauregui! -reí. -Quería verte, y saber como estabas. Y por tu aspecto, veo que bien. Y también te veo recuperada. Y eso me alegra mucho. -apretó mi hombro.-
-Gracias por venir! Lo aprecio mucho. Y yo también te veo bien. Oye! Dónde está Casie?
-Pues se ha quedado en casa con Bella! Para la próxima la traigo conmigo! -miró el lugar. -Que buen chozo tienes eh!
-Es de mi familia, y la familia de Camila. Yo estoy haciendo mi propio lugar. Ya me conoces!
-Si, desgraciadamente de conozco!
-Oye! -golpeé su brazo mientras el reía. -Pero... -me miró. -No solo has venido a verme, no? Y si has venido hasta aquí, es porque has estado investigando lo que te pedí.-
-Si. Y desgraciadamente, no he averiguado mucho. Pero lo que tengo, es bastante curioso.
-Curioso? -fruncí el ceño.-
-Resulta ser, que ese tal Eugenio Siller, no existe.
