Casados por conveniencia | Jimin y tú

"Un nuevo chico"

Capítulo 38: "Un nuevo chico".

P.O.V ___

Agarré la copa y tome un sorbo incómoda.

—Eres linda, pero creo que no tenemos una química para ser una pareja —confesó Yoon Mi No.

Reí.

—La primera cita en que no me veo mal.

Rio también.

—Soy directo y sincero. Creo que somos más compatibles siendo amigos.

—Lo apoyó —ladeé una sonrisa.

—Me dijiste antes que quieres casarte y tener una familia con el amor de tu vida.

Asentí.

—Sí, ya estoy grande y creo que debo dar el siguiente paso —dije— Antes no me gustaba el casamiento, lo consideraba como una atadura pero fui madurando y comprendí que no muchas veces es así.

—Lo comprendo, suele pasar. Vivimos en un constante cambio —comentó Mino. Sonrió mirando mi muñeca—. Esa pulsera, la he visto en Canadá.

Sentí vergüenza.

—No te preocupes, yo también lo tengo —mostró.

—¿Hace cuánto lo tiene?

—Un año. ¿Quieres que te dé un consejo?

—¿Qué cosa?

Suspiró.

—No hagas que tu vida dependa de tu pulsera. Has de cuenta que no la tienes, porque así nunca lo conseguirás.

—¿Y sí en realidad no existe la leyenda de esta cadena?

Rio sutil.

—No la llevaríamos, tenemos fe. Fe que transmite y atrae a la persona que vamos amar. Simplemente no le des importancia.

—Kure (está bien). Lo haré —sonreí.

[...]

Toqué la puerta. La abrió haciéndome pasar el psicólogo.

—¿Por qué llamó? —pregunté curiosa.

—¿Quería saber que cómo has estado con tus problemas?

—Si me quiere cobrar una sesión, no tengo dinero —«En realidad si tengo».

Rio irónico.

—Soy de preocuparme mucho con mis pacientes.

—Fíjese que he venido un día.

—¿No le caigo bien?

—No me cae bien, y peor si tiene algo que ver con Jimin —dije seria.

—Hagamos algo divertido. Imaginé que yo soy Jimin.

—¿Ah?

—Soy Park Ji Min, ¿que me diría usted? Sirve mucho para sacar ese enojo que tiene hoy mismo.

Le lance un almohadón molesta.

—Idiota los dos.

—No pensé que fuera tan rápido.

—Ni siquiera sé como hablarle. Son todos unos imbéciles —dije con mis ojos llorosos.

—Srta Park ___.

—Me rindo. Ojalá se quedé por mucho tiempo en su casa —comenté yéndome. Al llegar al ascensor dudé en apretar el botón. Sentía como que si algo me impidiera irme. No obstante, me fui.

Días después...

Hace varios días no me habla Park Ji Min, y no lo he visto casi por la empresa. Sin embargo, quiero hablarle y conversar sobre su perdida de memoria. Por lo que decidí buscarle para invitarle a comer.

Me mandaron a la bodega de cajas donde supuestamente estaba Jimin.

Pasó por los estantes de cajas escuchando de eco mis pisadas hasta quedar atónita en un lugar.

Jimin estaba tirado en el suelo  con una caja encima.

—¡Jimin! —Fui hacia él desesperada quitandole la pesada caja.

—Srta Park —abrió los ojos, toqué su cabeza el cual sangraba.

—¿Qué te pasó? —Tomando el celular para marcar a la ambulancia.

—Estoy bien, solo que... ¡Ayyy! —Se agarró la cabeza adolorido.

—No te mueras, Park Ji Min —dije dramática.

—No me voy a morir, fue un pequeño golpecito con la cajas.

Llamé a los médicos, ya estaban por venir.

—Aguanta, ok? —al borde de las lágrimas.

Sus ojos se cerraban.

—Anio, anio, anio, no puedes. Despierta Jimin —lo sacudía.

—E-estoy b-bien —le costaba respirar—. ¿Ya me creíste?

—Siempre te creí. Sé que perdiste la memoria.

Ladeo una sonrisa.

—Que bueno, puedo seguir adelante.

Llegó el auxiliar medica llevándose a Jimin del lugar. Por lo que veía estaba muy mal, el golpe fue fuerte para él.

Me encontraba preocupada, quería acompañarlo pero mi padre se interpuso en el caminó.

—¿Qué haces? Quítate de mi camino.

—No vayas con él, todos te están viendo.

—¿Y? ¿No ves lo que le ha ocurrido?

—____, te quedas conmigo.

—¡Appa! —Elevé la voz.

—Él no le importará que no vayas, así como no le importó dejarte la aquella vez —contestó. Vi como la ambulancia se iba.

Mordí mi labio inferior y me resigne con ojos húmedos.

—Tienes razón —dije irónica.

[***]

Me apetecía publicar este capítulo :v