Casados por conveniencia | Jimin y tú

"Gracias Jimin"

Capítulo 18: "Gracias Jimin"

—¿Te gusta el café con azúcar? —Dije despacio, insegura que le gustará.

Lo miró desconfiado. Tomó un sorbo y no escupió.

Exhale aliviada.

—Qué bueno.

—¿Por qué de repente?

—¿Cómo por qué? Yo ya no sé si te gusta el amargó o no, todos los días cambias tus gustos —reclame, lo que provocó una risa sutil.

Sonreí por al menos reírse por una tontería mía.

—¿Has dormido bien?

—¿No se está pasando? No la conozco.

Suspiró pesado.

—Aigoo, no aprendes nada. Kure, tienes razón, me mantendré treinta metros lejos a ver si me conoces —lo rebajó ofendida, llevando mi cabello hacía atrás.

Vuelvo a la oficina de vuelta, el secretario me esperaba atentó.

—¿Ya tomó ese airecito de la Guadalupe?

—Yee (sí). —Sonreí.

—Por casualidad, ¿pasa algo?

—Anio, ¿por qué?

Achino sus ojos desconfiado.

—Tu ojo derecho está temblando, ¿ahora quién te da estrés?

Me pegué la frente. Masajeó mi ojo derecho, tratando de calmar el tic.

—Trabajo, ya sabes.

—Oye, hay algo que me he preguntado anoche en la ducha —dijo tomándose del mentón.

—Ok, no hacía falta detalles.

—¿Qué pasó con Park Ji Min?

Mi tic se elevó. Solté un suspiró apretando mi puño.

—Otro problema ha causado, ¿no?

«Peor».

—Secretario YongHwa, necesito consejos.

—¿Consejos? ¿Cómo qué?

—¿Cómo puedo ser amiga de un hombre? —Se sorprendió, agarrándose del pecho.

«¿Qué?».

—¿Ahora está preparada para tener un hombre? —Preguntó asombrado.

—¿Ah? —Fruncí el ceño.

Flashback.

—Apenas me divorcie voy a besar muchos hombres. Conseguiré ser novia de doctor, alguien que realmente valga la pena.

—¿Y por qué no lo hace ahora? Alguien que sepa amarla, entendería su situación.

Solté una carcajada.

—¿Y qué le digo? "No me puedo divorciar porque mi querido esposo huyo de mí, y no sé dónde está" —comenté sarcástica, continuó—, cualquiera huye de mí, diciendo eso. Y de verdad lo intenté.

Suspiró.

—El día que esté preparada espero estar aquí con usted. Porque esperará cincuenta años así.

Fin del flashback.

—Ah... cierto —dije recordando aquello.

Sonrió.