Capítulo 13 Maratón 1/3 Primer Secreto

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HARRY'S POV.

- ¡Harry subamos a la montaña rusa! - exclamaba Memphis emocionada.

Miré el gran juego el cual media unos dieciséis metros de altura, miré a los vagones ocupados de gente ir de una curva a otra. Negué con la cabeza -. Yo te espero aquí - le dije, no me quería subir.

- ¿¡Qué!?, ¡No! Tú me acompañas, esa era la idea - refunfuñó molesta, me tomó de la muñeca forzándome a la fila de gente.

- Podríamos venir este fin de semana - ofrecí, se dio la vuelta subiendo su rostro para mirarme y contestar:

- Harry, ya estamos aquí, aparte... el fin de semana vendrá mi primo.

- ¿Y?

- Iremos a la nieve.

- ¿Y?

Rodó los ojos -. ¡No me importa! - chilló -. Subámonos a la montaña rusa y te doy algo a cambio - ofreció.

- ¿Lo que yo te pida? - asintió, reí suavemente -. You make me wanna - tssss - one more night - susurré lo menos audible.

- ¿Qué? - preguntó confundida.

- Oh, nada... nada - reí sarcásticamente.

La fila avanzaba de a poco.

- Harry, vamos - sentí la mano de Memphis sobre mi brazo haciéndome subir a un vagón, o lo que sea que fuese de primer lugar. Me senté a su lado e imite su acto abrochándome el cinturón.

- Sigo diciendo que debiste subir sola.

Bufó - ¿Por qué? ¿Te da miedo? - rió.

La miré y dejó de reír, esta vez reí yo y ella desvío la mirada - ¿Sucede algo? - quise preguntar y coloqué mi mano en su pierna, ella me miró y la quité. No sé qué mierda acabo de hacer -. Olvídalo - dije y la máquina empezó a avanzar. Mierda.

MEMPHIS'S POV.

El juego empezó andar y nunca había visto a Harry tan nervioso, empecé a gritar al igual que los demás, desvíe la mirada encontrándome con los ojos verdes de Harry y su expresión era la más graciosa que he visto en toda mi vida, me puse a reír de una manera muy enferma, el viento golpeaba mi cara y mi boca estaba seca gracias a lo rápido que íbamos.

- ¡Es divertidoooo! - grité -. ¡Grita Harry, grita!

- ¿Q-qué? - gritó.

- ¡Diviértete!

- ¡No puedo! - gritó mientras nos dirigíamos a lo más alto de la montaña para luego bajar de golpe.

- ¿¡Por quéeeee!? - le pregunté.

- ¡Me da miedo!, ¿Bien?, ¡Miedo!

Lo miré. ¿Le da miedo una manera montaña rusa? - ¡No bromees! - me puse a reír, pero luego callé al ver su expresión -. Lo-lo siento.

La tarde se pasó muy divertida, omitiendo algunas malas caras por parte de Harry, definitivamente no lo entiendo.

- ¿Lo pasaste bien? - le pregunté a Harry cuando nos entregaron algodones de azúcar.

- Sí - admitió -. No pensé que la montaña rusa fuera divertida - confesó.

- No hubiera pensado que te daba miedo - hice una mueca -. De todas formas todos le tienen miedo a algo.

- Y tú, ¿A qué le tienes miedo?

- ¿No me lo habías preguntado antes?

- No lo recuerdo, pero respóndeme - insistió.

- Está bien - dije, me puse a pensar en algo que no quería que me pasara nuevamente - Le tengo miedo a la traición... a que la gente me falle, que me engañen y jueguen con mis sentimientos - lo miré -. Ya me ha pasado, no es lindo, y menos cuando confías en esa persona - hice una mueca, mantuve la mirada fija en sus ojos -. Yo confío, confío en ti, Harry.

Negó con la cabeza -. No digas eso, no me conoces.

- Y tú crees conocerme - manifesté.

- Yo sé cosas de ti, que tú no sabes que yo sé - dijo muy convincente de sí mismo.

Subí una ceja -. ¿Qué cosas? - pregunté fisgona.

- Nada interesante - respondió, abrió la boca para decir algo pero calló.

- Ibas a decir algo - dije, negó con la cabeza -. Dilo - hablé.

- ¿Andas posesiva?, me gusta, creo.

Lo miré unos segundos más. Lo que habpía dicho me dejó perpleja, ¿Yo? ¿Posesiva?

- ¿Has estado con alguien alguna vez? - quise saber, me mataba la curiosidad, pero no tanto como saber sobre su familia, eso sobrepasaba mi curiosidad.

- No.

- ¿Enserio? - pregunté desconcertante.

- Sí, ¿Te sorprende?

Asentí - O sea... un poco, eres atractivo y... - dije, nunca fui una persona que escondiera tanto sus pensamientos, pero muchas veces prefería guardarlos y no decir nada.

- ¿Qué harás el viernes? - sus palabras me sacaron de mis pensamientos, cambiando el tema.

- Uhm, nada - respondí.

- ¿Quieres ir a una fiesta?

- ¿Una fiesta? - pregunté respondiendo.

- Supongo que habrás ido a fiestas antes - dijo.

- Si... No creo que sea buena idea, no acostumbro a salir mucho, y menos a fiestas.

- Anímate, Memphis.

Al final terminé aceptando, hace tiempo que no iba a fiestas, la última vez fui con Pascale a la fiesta de una chica del colegio.

Arreglé mis cosas para el colegio y al fin a la cama, mi subconsciente daba vueltas con mis reprobaciones en matemáticas, me va a ir pésimo. Estúpida, estúpida, estúpida.

Siete Secretos De Un AsesinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora