Me Arriesgaré a Amarte ©

Mi paciente favorita (cap48)

Habían pasado varios días en los que no había podido tener muchas visitas, solo veía a mi hermano, mamá, papá y Tadeo.

Amaba pasar los pocos minutos que me permitían estar con Tadeo, llevaba girasoles para adornar la triste habitación que me habían asignado, Tadeo me contaba sobre las locuras que Cooper hacía en su apartamento y en lo poco que había crecido.

Me mostraba fotos de Cooper durmiendo en la bañera vacía , enredado en papel higiénico, dormido boca arriba con las patitas al aire y muchas cosas tiernas y divertidas. Extrañaba mucho a ese canino. Hoy tocaba hacerme exámenes de la vista y unas radiografías.

— Buenos días Señorita Sofia. — Dijo Lucas con carpeta en manos.

— Buenos días Doc. — Dije con un deje de diversión. Lucas suspiró y me observó detenidamente a los ojos. Parecía divagar como si sus pensamientos estuviesen fuera de órbita.

— ¡Ujum! — Carraspeé. Lucas captó mi atención y revisó nuevamente la carpeta en manos.

— Aun no soy Doctor, pero me gusta que me digas Doc, me recuerda mucho a... — se quedó en silencio.

—¿ Aaa? ¿ a quien te recuerdo? — dije con curiosidad. — Amm... Nada, bueno estas semanas has avanzado mucho en tu recuperación, si sigues así pueda que salgas lo más pronto que te imaginas. — Dijo cambiando el tema.

— Vale y ¿que haremos hoy?— Pregunté llena de curiosidad. Desde que Lucas empezó a cuidar de mí, ya me era posible ver un poco de Tv, jugar algún juego como monopolio o Jenga. Juegos que me eran permitido.

Lucas sonrió y pasó su mano por su cuello. — Podemos hacer algo diferente si lo deseas. — Dijo con emoción.

— Vale, ¿que podemos hacer?

— ¿ Te gustaría ir un rato a la terraza? Hoy en la noche habrá una lluvia de estrellas fugaces.

— ¡Me encantaría! — dije aplaudiendo como una niña pequeña. Lucas sonrió con esa ternura que lo caracteriza y se acercó a sentarse en él sofá de la habitación.

 — No debes decir nada o podrían sancionarme. — Dijo ahora serio.

—  ¿El que? Hmmm yo no se absolutamente nada. Es más, ¿de que hablábamos? — Dije haciéndome la desentendida.

—  ¿Ugh? ¿Perdiste la memoria o solo fingiste olvidarlo? — sonrió el chico nuevamente.

— Jajaja ahora me conoces un poco más Doc.

Tocaron a la puerta y una chica con una barriga considerablemente grande se asomó. Era Alice y a su lado Drake. - ¡Oh por Dios! Al 
Alice con una sonrisa extra larga se acercó hacia mi camilla y me abrazó con delicadeza.

—  ¡ Tía , os extrañé!  Drake llevaba un enorme peluche de un panda en manos y lo colocó en el sofá . — Este es un regalo de tus amigos que te extrañan mucho o sea nosotros hermana menor. — dijo Drake sonriente.

—  ¡Yo lo escogí! — dijo Alice abrazándome aún Más. — Estas hermosa Al, y esa bella pancita, ¿cómo está? — Dije mirando su vientre.

Alice sonrió y observó a Drake para luego observarme a mi. 

— Pues... En realidad son gemelos, amiga. Me emocioné al escuchar que Alice tendría gemelos y hasta se me salían lágrimas de la emoción, yo era algo dramática , sensible y muy llorona.

—  ¡Hostias! ¡Qué buena nueva! ¿Son niños?

—  ¡Son la parejita! — Dijo un Drake orgulloso.