Marry me? Final

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«Siempre me arriésgare a amarte»

El año estába a punto de terminar, para ser más precisos estábamos en Noviembre. Me encontraba en la casa de Tadeo, bueno, nuestra casa, acomodando los muebles, sacando las cosas de la mudanza. Era el lugar perfecto para mí, para Tadeo y por supuesto, Cooper.

Cooper tenía un gran patio trasero para el solito, donde podía jugar y donde compartiría con una linda perrita que pensábamos adoptar más adelante.

—¿Amor? , tengo una sorpresa para ti.— dijo con una enorme sonrisa.
—A ver, ¿ qué es?— entré cerré los ojos.

—Algo que juro que te va a encantar pero debes cerrar los ojos. ¡ Y no hagas trampa!— Cerré los ojos y dejé que Tadeo me guiará hasta donde estaba la sorpresa. A mi me encantaban las sorpresas, estába súper ansiosa por abrir los ojos.

—Bien, unos pasos más Mmmm... Listo. Abre los ojos.
— Abrí los ojos y vi una puerta cerrada que daba una habitación, pero esta habitación estába en el patio, al abrir la puerta me llevé una gran sorpresa.

—Es... ¿Esto es para mi, Tadeo?— sollozé de la emoción.—Es todo tuyo mi amor.— besó mi frente.
Me lancé a sus brazos y lo besé muchas veces en los labios.

—Gracias , Gracias, gracias mi vida. Tadeo había hecho un estudio de arte para mi, estába mega equipado, el sitio era estilo bohemio, las paredes y toda la habitación era de madera, parecía una pequeña cabaña, habían atrapasueños móviles en el techo girando con el viento, había una ventana que daba hacia el patio y al rededor de ella estában unos pequeños cactus como decoración.

Había una mesa larga con unos cajones de colores, cada uno de ellos contenían pinturas acrílicas, pinturas para hacer cuadros en óleo , habían pinceles de todos los tipos, cuadros y lienzos para crear mís dibujos. Una lapicera llena de colores y demás. Estaba anonada con la sorpresa, mi propio lugar para hacer lo que amaba, para hacer Arte.

La habitación era grande y espaciosa y podía decorarla a mi gusto.—Mi amor te haz lucido completamente.

— y eso es el comienzo mi pequeña, te daré todo lo que necesites para ser feliz.

Me acerqué a Tadeo y rodee con mis manos su cuello, lo miré a los ojos y este me sonreía.— Me haces muy feliz Madsen.—dije acariciando su cuello.

—Y tu me haces el hombre más feliz de todo el universo mi amor. Si no te hubiese conocido, creo que jamás conocería lo que es el amor verdadero.

Tadeo me cargó en sus brazos y me colocó en la mesa de la habitación.
—Me tienes loco y enamorado.—Sus labios acariciaron mi cuello, lentamente dejó besos en el hasta llegar a mis hombros.

—Eres mia, solo mía. Volvió a mis labios y los tomó con intensidad, mordiendo y lamiendo mi lengua con la suya.— Solo tuya. —jadie en sus labios. —Enredé mis piernas en su cintura y lo apegue más a mi cuerpo.

Metí mis manos dentro de la camiseta de Tadeo y acaricié su suave espalda, le quité la camisa y mordí suavemente su cuello, subí a su oreja y pasé mi lengua. Tadeo se estremeció con la sensación y comenzó a bajar su pantalón.

Abrió mis piernas y quitó con rapidez mis bragas tirándolas en el piso.
—Eres muy traviesa. —sonrió cuando toqué sus glúteos con fuerza.

Me Arriesgaré a Amarte ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora