¿Qué harías si te enteraras que tu amor de verano, no es nada menos que... tu nuevo profesor?.
Aimee, es una estudiante normal de la universidad Lion State, a la cual, las cosas se le ven muy complicadas, cuando por cosas del destino descubre que e...
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⌠Solo una invitación⌡
Después de mi corta estadía en el hospital, pase todo el fin de semana en casa, recuperándome. Mi madre al enterarse se llevó un gran susto; por lo que, luego de la gran preocupación que había sentido, ella me daba de comer todo lo que pillara en la cocina, estaba empecinada con que yo comiera todo lo que pudiera.
—Mamá, me dijeron que solo tenía una leve desnutrición. No hay que exagerar —comenté mientras ella ponía en mi mochila más comida.
—Nunca esta demás llevar colaciones extras. Como dice el dicho, mejor que sobre a que falte —orgullosa cerró la mochila—. Además, Aimee después de lo que te paso, no quisiera que te vuelvas a descompensar.
Asentí en silencio, se notaba que ella estaba preocupada por mi salud. Si con hacerme mil platos de comida, ella lograba quedarse tranquila, entonces la dejaría.
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Ya con todo listo para dirigirme a la universidad, me dispuse a salir de la casa. Abrí la puerta principal y salí por el pequeño patio delantero que poseía nuestra humilde casa. Saqué mis audífonos para acompañar mi camino con un poco de música, cuando de pronto escuché unos ruidos extraños, que provenían de los arbustos. Decidí acercarme lentamente para saber que había oculto en ellos cuando de repente, alguien salió gritando de ellos.
—¡Buuu!
El grito me hizo saltar del susto. Era el orejón más fastidioso de todos.
—¡Ay, eres un estúpido Park Chanyeol! —espeté fastidiada.
Solo al ver mi cara el comenzó a reír, con esa particular risa que lo caracterizaba.
—Lo siento, lo siento... no te enojes —dijo entre carcajadas.
—¡¿De qué te ríes?, no es chistoso! —señalé fulminándolo con la mirada.
—Pues para mí si lo es —levanté mis cejas al escuchar su respuesta, por lo que se apresuró en decir—. Bueno, solo un poquitín...
—¿Te odio sabías?, pareces un niño pequeño Chanyeol
Rodeé mis ojos y me puse los auriculares, para comenzar a caminar y así dejarlo solo.
