THE LULLABY OF DEATH

82 2 0
                                    


CHAPTER TWENTY EIGHT | THE LULLABY OF DEATH

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

CHAPTER TWENTY EIGHT | THE LULLABY OF DEATH


Cada paso que daba era un incesante dolor de cabeza, que se agravaba a cada segundo con el horrible jazz que acompañaba al inmenso cortejo fúnebre junto con el fuerte sol, que le pegaba bruscamente en la cabeza. Como una sumisa, Grace, seguía al ataúd, tirado por los caballos, a unos pocos metros de los dos hermanos Mikaelson quien al mismo tiempo eran seguidos por las hermanas Williams. Con un ramo de flores entre su manos miraba observando cada detalle de los pétalos además de descubrir cuanto odiaba los funerales, siendo interesante ese echo cuando ella nunca había estado en uno siendo ese el primero. Su mirada vacía volvió a alzarse al sentir un poco de sombra producto de unos árboles que rápidamente quedaron distantes, como la mirada que dio a Elijah cuando sus ojos se cruzaron.

Rápidamente volvió a fijarse en el féretro esquivando cada intento de contacto del original. Sabía que sí pasaban más de cinco segundos mirándose ella lo atacaría, sin piedad como lo hicieron con su amado Lucien no hacía más que unas horas.

De alguna manera quería olvidarlo pero le era imposible cuando lo había visto morir en frente de sus ojos, sin poder hacer nada más que observar. El tenerlo grabado en su retina hizo que los párpados de Grace no pudieran contener las dos lágrimas que bajaron por su mejilla que acabaron siendo absorbidas por su gabardina negra.

¡No! - recordaba haber gritado, mal habiendo salido del coche observando a Lucien arrodillado en frente de Klaus, impotente y derrotado, algo que ella se negaba a recordar.

Mientras corría hacia la destrozada casa de madera se alzaban a su izquierda dos coches que habían colisionado , teniendo uno de ellos un ataúd siendo el de Rebekah que sobresalía por una de las ventanas. Grace siguió corriendo hasta que algo le hizo retroceder anclándola allí, al mirar sobre sí misma veía a Elijah imponente y decidido a no dejarla ir.

Suéltame, AHORA- le ordenó, sin dejar que su voz temblara por el miedo y la furia.

Lo siento, no puedo.

¿Cómo has podido? -Le cuestionó, mirándolo con puro odio.- Pensaba que había algo entre nosotros.

Yo también lo pensaba...

Grace intentó soltarse de sus brazos de acero mientras veía a su enemigo con ese aire superior y victorioso, y supo que sólo podía usar su magia para liberarse. Con toda su determinación hizo que sus manos se volviesen de fuego como para soltarla, correr nuevamente y detener a Klaus, quien no la ignoraba por completo sabiendo que la suerte estaba de su lado por lo que su hermana, decidida también a impedirla, dio un paso hacia delante con la mano en alto arrodillándola.

The Guardian Girl | The Originals #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora