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—¡Hey, Naruto!—Ino lo llama al divisarlo por las bancas del pequeño estadio donde se llevaría a cabo el partido de baloncesto.

—¡Vengan por aquí, muchachas!—replica el rubio agitando las manos.

Ino y yo caminamos muy pegadas por alrededor del campo de juego, hasta llegar a la zona donde se encuentran muchísimas personas de la universidad.

El campo no es tan grande, sin embargo, se encuentra en buenas condiciones. Puedo observar distintos tipos de cánticos al otro lado de nuestra zona de asientos, varias chicas traen pompones consigo y los mueven al ritmo de la melodía de los tamborines y trompetas. Es todo un espectáculo.

Por nuestro lado no nos quedamos atrás. Naruto y varios representantes de otras aulas del curso se organizaron y alquilaron instrumentos para apoyar al equipo de la universidad. Muchos banderines flameando el ambiente tienen los nombres de los integrantes que disputarían ante el otro equipo. Ino está sentada a mi lado agitando una banderita con el nombre "Sai" en ella, todo el entusiasmo reflejado en su cara.

—A que se ve ardiente en ese uniforme—me señala con la punta de la banderilla a su novio, quién se encuentra calentando junto al resto. Me inclino un poco a un lado para escuchar mejor, los gritos de las personas no ayudan mucho.

—Nada mal,—replico con honestidad tomando mi barbilla—hasta puede que te lo quite.

—Hey—me da un golpecillo con su hombro, rio ante mi broma.

—¿Saben que hay una rivalidad histórica entre nuestra universidad y la de ellos—Naruto se interpone entre las dos, sorprendiéndonos.

—He oído de ello. Siempre existen comparaciones entre que universidad tiene el mejor rendimiento, calidad de educación, egresados con calificaciones altas—replica mi mejor amiga, aún con sus ojos siguiendo a Sai.

—Y siempre chocan en las competencias inter escolares—el rubio interrumpe, levantado el índice—por eso existe una enemistad, especialmente en el ámbito deportivo.

Una ola de gritos femeninos de repente llega a mis oídos. Todas las personas se apegan a las mallas de seguridad que rodean los alrededores del campo. No logro ver porque tanto alboroto.

—Así que al final vino,—el rubio canturrea, dejando el lugar donde había estado sentado no hace un par de segundos atrás—no se preocupen, pasa muy a menudo, al parecer no hay suficientes chicos atractivos en la otra universidad—bromea.

Mi corazón da un brinco al poder verlo entre toda la multitud que ya se acerca a rodearlo.

Mantiene su cabeza agachada, como si tuviera cero interés en saber quiénes lo llaman o porque se acercan a él.

Luce espectacular. Eso es algo que siempre me llama la atención, la paleta de colores que usa en su ropa es muy opaca, pero hay algo en él que ilumina por completo cualquier lugar que transita, siempre es objeto de murmuros o alagos, a él no parece importarle.

Nada parece importarle.

Un espasmo recorre mi espina dorsal ante lo que acaba de ocurrir.

Sasuke ha encontrado mi mirada en la suya.

Giro a mis lados para tratar de hacerme la desentendida, cosa imposible, no tengo con quién iniciar algún tema de conversación, Ino se ha sentado una fila más adelante para poder ver mejor a Sai y Naruto parece un loro sin cuerda hablando con Shikamaru en la zona de juego.

Sus pasos comienzan a acelerar. Cruza todo el mar de personas que lo ovasionan como si fuera algún tipo de famoso y empieza a subir los escalones, se está dirigiendo hacia mi fila.

PEQUEÑO DILEMA /SASUSAKUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora