No me rendiré.

3.8K 118 2
                                    

NARRAS TU:

Ya habían pasado exactamente 1 mes y medio desde la ultima vez que hablé con Justin. Ahorita mi estómago estaba creciendo, y en un mes voy a poder saber el sexo del bebé. La verdad que estaba emocionada, pero por dentro destrozada, ya que no sé si Justin lo podrá ver. Una lágrima traicionera se me escapó y la quité bruscamente.

Me habría prometido no llorar otra vez por el mismo hombre. Me entretuve cocinando unas chuletas, cuando me llegó una llamada, rápido me limpié las manos y me fijé en la pantalla, en grande aparecía la palabra "Mateo" así que contesté.

LLAMADA:

-Hola bebé, ¿cómo has estado?- me preguntó alegre, parecía mi novio, pero no lo era. Para mí es solo un amigo, aunque no estoy muy segura de los sentimientos que él me pueda llegar a tener.

-Mateo, te he dicho que no me llames asi, me incomoda, y he estado bien, gracias por preguntar- dije ya fastidiada, era la tercera vez que me llamaba solo para decirme piropos que no me gustaban.

-Lo siento... quería saber si-si ... tú quieres salir conmigo a algún lugar- dijo nervioso.

-Está bien, ¿a qué hora?- pregunté, aunque ahorita no esté de humor, no le podía decir que no.

-A las 4 paso por ti- terminó para después colgar.

FIN DE LA LLAMADA:

Me fijé en mi teléfono la hora, abrí los ojos al darme cuenta que solo faltaba media hora para las 4. Le apagué a la estufa y me fui a cambiar. No elegí algo extravagante, no tenía ánimos de arreglarme. Cuando tocaron el timbre me miré por última vez en el espejo y fui a abrir. Al verlo, estaba muy arreglado, le resaltaban esos ojos verdes, y ese cabello castaño tan suave que se le veía, además, la vestimenta daba a la vista desde lejos su cuerpo tan bien formado. Aunque, nada comparado a Justin. No me había dado cuenta que estaba encerrada en mis pensamientos.

-¿Ya nos vamos?- dijo pasándome la mano por la cara, yo solo me limité a asentir y subirme al carro.

-¿A dónde vamos?- pregunté, me fijé por la ventana las calles que recorríamos. Me entristecía ese lugar, ya que no era muy bonito que digamos, habían señores tomando y fumando en la banqueta o algunos estaban casi teniendo reaciones.

-No te preocupes por ellos, pero te sugiero que no te les quedes mirando, ellos no son para nada amables.- dijo, pero ya era tarde, mientras él hablaba, yo estaba al pendiente de un señor comiendo en la banqueta, después de que Mateo terminara, el señor se me quedó mirando y me enseñó el dedo de en medio, para gritarme cualquier tontería.

-Te dije- dijo Mateo riendo, y yo solo lo fulminé con la mirada.

Después de ese momento incómodo, llegamos a un pequeño parque con muchas flores, nada comparado a lo de hace rato. Me bajé del coche y empecé a mirar por todos lados, hasta que alguien me agarró de la cintura y me besó. Me tomó de sorpresa, así que lo mejor que pude haber echo fue darle una cahetada.

-Oye, ¿qué te pasa?- dijo Mateo sobándose la mejilla, ahora roja.

-¿Por qué hiciste eso?- comenté enojada, él me miró y suspiró.

-Hay algo que no te he dicho - soltó de repente.- había algo que no me gustaba, pero lo dejé continuar- Cuando te vi por primera vez, sentí una electricidad en mi cuerpo, tenía tiempo que no lo experimentaba. Tú me gustas y mucho________ , y sé que no tiene mucho que nos conocimos, pero me enamoré de ti, y quisiera saber si ¿tú-tú quieres ser mi novia?- cerró los ojos al terminar. Temía que dijiera eso, porque yo solo lo quería como un amigo, y para nada como otra novio.

-Mateo... sabes que te quiero, pero, perdóname, no quiero ser tu novia. Yo solo te veo como un amigo, y no como algo más, espero y no me odies, y que nuestra relación siga igual - dije, para después darle un beso en la mejilla. Me iba a parar para ir de nuevo al coche, pero un dolor en mi muñeca no me dejó, me fijé y vi que Mateo me tenía agarrada de la mano, hasta rojo estaba de la ira.

-Me-me estas lastimando, suéltame- dije he intenté soltarme de su agarre, pero no podía, era demasiado fuerte.

-Sabía que ibas a decir que no... por eso tenía un plan B, te daré un castigo- sonrío con malicia. Yo lo miré asustada, quería gritar, pero me había tapado la boca, y me llevó a un rincón del parque.

-No, por favor... no lo hagas, te lo suplico- dije llorando.

-Ya es tarde- me empezó a besar el cuello de una manera violenta, dejándome solo con el dolor. Lo único que podía hacer es llorar, ya que no podía pegarle, tenía mucha ventaja de estrellar su rodilla a mi estómago.

-¡Déjala!- gritaron a lo lejos, me fijé, y vi que era...

--------------------------------------------------------------------------------------------

¡Hola! Bueno, les quería decir que aquí está el capítulo, y espero y les haya gustado. También aprovecho para decirles que ya tengo el otro capitulo listo, me he tomado el tiempo de escribirlos, y por ahora subiré solo estos 2 capítulos, trato de que los capítulos sean algo largos, por lo que me toma tiempo escribirlos.

Como verán, en este otro, tanto no se trata de Justin y su "dolor" si no que hice esto como para dejarlas un poco con la intriga, y además esta idea ya me había surgido unas semanas antes, asi que lo quise escribir... bueno, eso es lo que quería decirles, no olviden comentar y puntuar, adiós. 🐷

-

-

Golpes. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora