Donde Min Yoongi es un rompecorazones de primera y Jung Hoseok es su mejor amigo desde la secundaria.
Un lugar en el que Park Jimin es el chico "codiciado" y Min Yoongi necesita tenerlo.
Y Jung Hoseok es el mejor amigo que empieza a dudar de sus...
–Ya despierta maldito holgazán –me quejo entre risas mientras entraba a mi cuarto con un par de tazas, una con café y la otra con té de hierbas.
–Cinco minutos más, por favor –lo único que podía ver entre todas las capas de sábanas era el cabello rubio de mi novio.
–No tenemos cinco minutos, ¡llegaremos tarde! –dejé las tazas sobre la seguridad de mi escritorio y me dispuse a destapar al bello durmiente que yacía en mi cama.
–Vamos Hobi, estaba teniendo el sueño perfecto –fue entonces cuando sentí los fuertes brazos de mi novio rodear mi cintura y tirarme a la cama para luego acurrucar su rostro en mi cuello.
Era estúpido lo feliz que me hacía estar así con él, todas las mañanas me hacía sentir como el chico más afortunado del mundo y era adorable como se empeñaba en hacerme sentir querido hasta en los detalles más mínimos.
–Kookie, me haces cosquillas –reí levemente al sentir su cabello y respiración por todo mi cuello.
–No quiero ir a clases Hobi... –sentí que el agarre de sus brazos se hacía más fuerte contra mi cintura.
–Una lástima Jeon, tu deber es ir a clases –rodeé los ojos e intenté moverme un poco para alejarme y así poder verlo mejor.
–No es justo –cuando logré alejarme pude ver el mohín más tierno del mundo–, mis clases empiezan en dos hora más.
–Pero debes ir conmigo porque prometiste ser mi modelo Kook –sonreí con suficiencia al ver suspirar a mi lindo novio.
Y si había algo que amaba, era tener la razón y ganar una discusión a primera hora en la mañana. Me levanté con una sonrisa en el rostro, con Jungkook siguiéndome y tomando cada uno su respectiva taza. Tomamos el líquido en silencio y de pronto una idea se vino a mi mente, dejé mi taza de vuelta en el escritorio y abrí uno de los cajones para sacar mi cámara polaroid, miré a Jungkook de reojo, notando que se sentaba en el borde de la cama mientras seguía bebiendo despreocupadamente del contenido de su taza y sin dejarlo prepararse saqué una foto espontánea del momento.
–Hoy seré tu modelo y tendrás mejores fotos –se quejó mi novio.
–No hay nada como un modelo despistado –reí y me senté sobre sus piernas mientras esperaba a que se revelara la foto– ¿Ves? Tan guapo como siempre –entonces deposité un casto beso sobre sus labios.
Lo vi sonreír como el tonto que era (mi tonto) y me levanté para buscar la ropa que utilizaría en el día. Desde que había decidido por entrar a la facultad de fotografía, solía utilizar ropa más holgada y cómoda en comparación a lo que había estado utilizando durante mis años en bachillerato.
Dejé el bachillerato antes de que terminara oficialmente el año y decidí que era momento de asistir a terapia, porque tenía problemas que iban más allá de lo que había pasado durante ese año y gracias al apoyo de Jungkook fui capaz de enfrentar muchos de mis miedos.
Luego de un par de meses de haber iniciado nuestra relación, ambos decidimos que sería una gran idea vivir juntos, por lo que empezamos a arrendar un pequeño departamento con una habitación, la mudanza había sido la parte más difícil pero lo habíamos superado. En un inicio fue difícil, ambos sabíamos que no éramos como las personas que habíamos dejado en el pasado, sin embargo los miedos e inseguridades no se irían de la noche a la mañana.
Nos había llevado tiempo empezar a mejorar de manera individual, pero fuimos fuertes y lo logramos, todo lo que había sucedido nos unió aún más y nos hizo darnos cuenta que teníamos sentimientos por el otro.
Y ahora, después de casi un año, podía decir con toda seguridad que era completamente feliz estando con Jungkook en ese momento, no podía pedir nada mejor para mi vida.
Abrí el cajón del clóset en dónde guardaba mis camisetas y al sacar una, una foto cayó al suelo. La recogí y al verla sentí una leve presión en mi pecho, en la foto nos encontrábamos Yoongi y yo cuando estábamos en la secundaria, era la foto de la primera vez que gané un premio de baile y todo este tiempo había creído que se había perdido al cambiarme de departamento.
– ¿Todo bien bebé? –escuché preguntar a Jungkook preocupado mientras me abrazaba por la cintura y apoyaba su rostro en mi hombro.
Hasta ese momento no había notado que estaba llorando y una amarga sonrisa se dibujó en mi rostro, reviviendo todos los momentos buenos que tuve junto al que alguna vez llamé mejor amigo. Al que, después de haberle confiado mis sentimientos, perdí.
–Si... –mi voz quebrada decía lo contrario por lo que esperé unos segundos para tranquilizarme–. Sólo es una foto...
Sentí que el agarre de Jungkook se hizo un poco más firme, una forma suya de decirme sin palabras que estaba ahí para mi y que no me dejaría solo. Agradecía que me entendiera, que supiera leer los momentos en los que, más que palabras, solo necesitaba un abrazo o el agradable silencio.
Me sentía amado al fin, sin condiciones ni miedos.
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Al fin hemos llegado al esperado final de War of Hearts!
Un camino largo y que parecía interminable, aún recuerdo al iluso yo del pasado que había escrito 10 capítulos y creyó que eso era el final.
Gracias a las personitas que leyeron, votaron y comentaron a lo largo del fic~No saben lo lleno de felicidad que me sentía cada vez que veía que a alguien le gustaba este proyecto~
[EDITADO] Una vez más, gracias por haber leído hasta el final y perdón si no es un final como el que esperaban, yo tampoco esperaba que terminara así. Hay veces que la gente no cambia y debes tomar una decisión. Hoseok tomó su decisión y Yoongi la suya.
