Capítulo 21

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Ni siquiera había podido pararla, aunque bueno, estas consecuencias estaban claras en cuanto se enterase, opté por llamar a Alex para contarle lo que había pasado en el restaurante, así me olvidaba un poco de Demi, al segundo tono descolgó:

-¿Qué pasa?

-Tío.. Ya sé quién son esa gente -Tragué saliva para contar algo más, si así me lo pedía.

-Tardas en soltarlo.

-Parece ser que son bastantes, tal y como hablaban, pero sólo venían tres. Por lo que pude entender se hacían llamar Magcon o algo parecido.

-¿Magcon? No he oído ese nombre en mi vida, pero lo diré a mis contactos para qué intenten averiguar algo.

-¿Contactos? Alex, quedó claro que esto quedaba entre Harry, Cher, tú y yo.

-Y así es, simplemente necesitamos un empujón.

-Haz lo que quieras, pero si la cagas a mí no me eches las culpas.

-¿Por qué tienes tanto miedo a que la cague? Creo que ya he demostrado que he madurado, que ya no soy ningún novato.

-Precisamente tengo más miedo ahora que cuando eras un novato.

-¿Quieres que te quite el miedo llevándote de fiesta esta noche o tienes planes con Demi?

-No, no tengo planes con ella, así que supongo que acepto -Dije seco.

-¿Y eso? Qué raro, porque ahora estás que no vas a mear sin ella.. -Dijo en un tono que irritaba, como si me estuviera echando en cara algo.

-No quiero hablar de ello ahora, y aparte, me tengo que ir a fútbol, ¿A qué hora quedamos?

-No sé, depende de Cher, ya te llamaré y te aviso, pero a partir de las nueve tienes que estar preparado por si acaso.

-Vale -Colgué.

Me fui a preparar las cosas para ir al coche y dirigirme hacia el campo. Como siempre, me estaban esperando Calum, Michael, Asthon y Luke. Me acerqué a ellos y hice un saludo con cada uno, el mismo para todos, y al mirar hacia la izquierda pude ver a Demi, yendo hacia sus vestuarios, tranquila, como ella era siempre. Decidí pasar y dirigirme al vestuario de chicos con mis amigos y dejar que durante el tiempo de entrenamiento, el fútbol me evadiera de mis pensamientos.

Y así fue, por un buen rato no pensé en nada, cosa que en los últimos días parecía algo imposible, pero el fútbol lograba algo que ya no podía hacer ni pegarle puñetazos a un saco de boxeo. Al llegar a los vestuarios de nuevo, una mano sobre mi hombro me llevó aparte, era Calum:

-Tío, ¿Qué te pasa?

-Nada, ¿Por?

No es que me molestara que la gente se preocupara por mí, es que simplemente no me apetecía hablar con nadie de lo que me pasaba, era algo que odiaba. Y si con alguien me solté era Demi, pero eso ya no iba a volver a pasar:

-Te conozco y te pasa algo -Dijo mirándome con el rostro serio.

-Pues no sé, será un mal día.

-¿Un mal día con Demi?

-¿A qué viene eso?

-A que siempre que la vemos cuando venimos aquí, hay dos opciones, o vienes con ella, o sino vas a la puerta de sus vestuarios y la esperas para darle un achuchón que se quede sin aliento, y hoy no han pasado ninguna de las dos cosas, y tú estás raro, ¿Sospechoso, verdad?

Sin duda Calum estaba tan observador como siempre. Digamos que ser tan efusivo cuando la veía no ha venido nada bien para esto:

-Simplemente hemos tenido una pelea, ya se pasará.

-Pues sí que es raro, pero bueno, cualquier cosa ya sabes que puedes contar conmigo y con los chicos, no hace falta que lo diga.

-Lo sé, y gracias -Esbocé una sonrisa falsa, que creo que quedó más bien como una mueca.

-¿Quieres que salgamos de fiesta esta noche?

-No, ya me han salido otros planes, pero muchas gracias, de verdad.

Seguí a lo mío, a cambiarme, no quería más amigos protectores y psicólogos. Al menos que no fueran ellos, porque si les contaba la verdad tampoco me hablarían y eso no me compensaba, así que mejor quedarse callado y superar esto en silencio, como todo lo que he superado en la vida.

Salí del vestuario despidiéndome de todos con mi mejor sonrisa, como siempre, y según salía yo, Demi salía de su vestuario, se acercó a mí, supongo que por inercia:

-Hola, ¿Estás mejor de las heridas?

-Sí g-gracias -Dije balbuceando.

-¿Te pasa algo?

-No, simplemente.. El tiempo, que está cambiando mucho.

-Lleva haciendo el mismo tiempo una semana Austin. Prepárate mejor las excusas anda -Me dio un puñetazo leve en el hombro mientras ponía una de sus sonrisas.

-Ha sido lo primero que se me ha ocurrido.. -Bajé la cabeza.

-Ya sabes que puedes contar conmigo para lo que necesites eh.

-Lo sé, y lo mismo digo -Levanté la cabeza para regalarle una diminuta sonrisa.

-Bueno, yo me tengo que ir, mejórate -Se acercó para darme un beso en la mejilla y se oyó un "aww", procedente de los chicos.

-Venga cotorras, cada uno a su casa -Dije entre carcajadas.

Fui al coche para irme a casa y prepararme, tal y como había dicho Alex. Durante el camino me quedé pensando en lo natural que actuaba Demi y lo gilipollas que debía de parecer yo.. Era patético, lo sé, pero no sabía actuar de otra manera, con Demi me había abierto mucho, demasiado, pero bueno, ya no podía hacer nada, si algo me consolaba es que iba a seguir siendo mi amiga. Entre estos y otros pensamientos y recuerdos, se me pasó tan rápido todo que ya estaba cambiado para la fiesta, sentado en el sofá y esperando la llamada de Alex, que llamó al segundo de pronunciar mentalmente su nombre:

-Ya puedes bajar -Colgó.

Cogí lo necesario, las llaves, el móvil, una cajetilla de tabaco y salí de casa para montarme en el coche de Alex. Nos llevó a una discoteca que estaba bastante llena, pero no me importaba, más chicas con las que poder olvidar a Demi. Nos acercamos a la barra y pedimos unos cuantos chupitos de tequila, para empezar bien la noche.

La noche fue tranquila, o al menos eso parecía. Había chicas guapas por todas partes, pero o estaban con demasiadas amigas, guapas también o con otros chicos, así que fui a sentarme, pero Cher se sentó encima de mí:

-¿Qué le pasa a mi Austin? -Dijo mientras jugaba con mi pelo.

-Nada, simplemente he necesitado sentarme.

-Te tomaba por un chico de aguante, pero ya veo que no.

-Tengo mucho aguante eh -Dije haciendo gestos con las manos en el aire.

-Claro que sí bonito -Dijo con tono irónico.

-¿Quieres que te lo demuestre?

-No estaría mal.

-¿Qué tengo que hacer? -Dije esperando que el reto no fuera muy difícil.

-Espera un momento.

Se perdió entre la multitud y a los pocos minutos apareció con dos copas llenas hasta arriba, pero se volvió a ir para traer otras dos:

-Tienes que beberte todo esto del tirón y si aguantas, te vienes al baño conmigo.

Asentí y me bebí la primera copa sin problemas, la segunda ya fue algo más lenta, no era capaz de procesar tanto líquido seguido, y mucho menos tan cargado de alcohol, la tercera tardé mucho más, pero la cuarta casi fue como la seda, creo que ya no tenía mucho sentido común. Poco antes de acabarme la cuarta, alguien tapó la boca a Cher y se la llevó a algún sitio, pero entre tanta gente les perdí. Aquel chico que la había cogido me sonaba, pero, ¿De qué?

Mi mundo es así {Austin Mahone}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora