Capitulo tres
Narrador hiroto
Me encontraba en mi oficina observando unos cuantos documentos que me habían enviado varios líderes de las manadas, pues algunos estaban confirmando su asistencia para la boda, en donde presentaré a Maria como luna del convenio de la luna roja. Las puertas de fueron tocadas y con un breve adelante, entró mi beta el cual me vio con un semblante serio.
Hiroto: ¿que pasa goenji? - pregunté serio, el sabe que odio los rodeos y más el silencio.
Goenji: veo que recibiste las respuestas de los líderes y me gustaría saber si la reina del páramo vendrá - pregunto el rascándose la nuca con un semblante apenado.
Hiroto: supongo que Shirou te mando a preguntar para informarles a sus hermanos - afirme a lo que el tomo asiento en el mueble. - no entiendo esa de decirse hermanos cuando ni siquiera comparten sangre - dije revisando mi computadora, pues el convenio era conocido por tener un gran avance tecnológico.
Goenji: es porque en l páramo según el todos conviven y actúan como hermanos, y según Shirou pregunta porque hay un tema que no podemos tocar ante ella y ese es su hijo el cual murió cuando tenía diez años, el niño al parecer era hijo del Alfa de la manada luna creciente, pero debido al gran descuido de Serena el la odia y por ello no se unió al convenio.
Hiroto: eso lo escuché del esposo de Fudo una vez, la verdad también odiaría a Maria si algo le llegase a pasar a un cachorro mío, pero bueno cambiando de tema, me parece arcaico que tengan que enviar cartas de confirmación en vez de mandar un e-mail - bromeó para hacerlo reír, lo cual funciono
Goenji: con tal no sea incómodo el día de tu boda todo bien - respondió saliendo de la oficina dejándome con aquel pensamiento. Sin más seguí viendo las cartas, y al ver que faltaba una llame a uno de mis drones, los drones son unos pequeños discos voladores los cuales cree para las jaurías cuando salgan a las inspecciones de verificación de exiliados.
¿?: ocurre algo hermano - mi hermana mayor una Alfa médico de cabellos negros, ojos del mismo color, una piel más oscura que la mía y con un semblante casi igual de serio que el mio me observó entrando de forma rápida en la oficina - me mandaste a llamar con unos de tus drones por ello pensé que era urgente - respondió acercándose a mi escritorio.
Hiroto: hotomiko, Maria es una beta muy bella, al igual que es tu mejor amiga, por ello quiero saber si ella te busco hoy - pregunté serio, pues desde hace unos días tenía aquella espina clavada, ya que Maria me a dicho últimamente que va a ver a mi hermana.
Hotomiko: me preguntas ¿como Alfa?, o ¿como hermano? - pregunto frunciendo el ceño, a lo que yo la mire triste.
Hiroto: te pregunto como un hermano que pide un consejo - dije con un hilo de voz, casi nunca me he mostrado débil, pero ella es mi único pariente y puede verme como ella quiera.
Hotomiko: como amiga diría que ella ha estado frecuentando mi consultorio, pero lo más importante eres tú, y como hermana te digo que ella está ocultando algo, pero hermano te aseguro que ella te ama, tal vez no sean destinados pero estoy segura de que todo irá bien - ella rodeo con un fuerte abrazo.
Hiroto: de verdad necesitaba saberlo - dije correspondiendo su abrazo, le di un beso en la frente y ella soltó su agarre para dirigirse a la salida.
Hotomiko: estoy preocupada, cada vez más el convenio de la manada luna roja crece más, y por lo tanto hay más enemigos, aquellos que no están de acuerdo con la protección de los omegas vampiros, o los omegas licántropo, tu por otro lado eres un Alfa de rango superior. - dijo tomando el pomo de la puerta para girarlo. - tengo miedo de que aparezca un enemigo más fuerte, cada vez hay más personas que vagan por el bosque, vampiros que no quieren dejar de tomar sangre, felinos que no quieren dejar de cazar, brujas que no quieren dejar de maldecir, sirenas que no quieren dejar de cantar - ella me vio con un rostro doliente.
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Mi exiliado (OMEGAVERSE)
Acakmidoricawa es hijo de la reina del páramo, pero debido a que es un híbrido mitad licántropo mitad ninfa. No posee ni la belleza, ni las destrezas de ninguna de las especias por lo cual el Consejo del páramo obliga a la reina a tomar una desicion dev...